Natalio Grueso, un año a la fuga y cinco obras en gira
El exdirector del Niemeyer, pendiente ingreso en prisión, continúa en paradero desconocido a la par que publica libros y estrena adaptaciones teatrales
Hace ahora justo un año que la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Oviedo decretó el ingreso inmediato de Natalio Grueso en prisión para cumplir los ocho años de cárcel a los que había sido condenado en junio de 2020 por delitos de malversación de caudales públicos y societarios cometidos entre 2009 y 2011, cuando era director gerente del Centro Niemeyer. Desde entonces, nada se ha sabido de él, y ha protagonizado una evasión, más discreta que la de Puigdemont, pero consiguiendo del mismo modo sustraerse de la acción de la justicia.
La Audiencia dictó primero una orden de búsqueda y captura, pero los agentes no fueron capaces de localizarle en los domicilios que había notificado. De uno de los escritos presentados por su abogado, Francisco Miranda, se infería que se encontraba en casa de un amigo, pero no se especificaba la dirección. Así las cosas, y ante las sospechas de que Grueso podría haber huido al extranjero, en febrero se dictó una orden europea de detención y una requisitoria internacional.
Para tratar de evitar llegar a este punto, su abogado había intentado primero dejar sin efecto la orden de detención. Argumentaba que Grueso se encontraba ala espera de un indulto solicitado al gobierno, que no le ha sido concedido, así como otras cuestiones. Por una parte, que la salud mental del exdirector del Niemeyer era frágil y su vida corría peligro si ingresaba en prisión, y por otra que tenía importantes proyectos artísticos en los meses siguientes.
Y así ha sido. En este año se han representado en distintos puntos de la geografía española hasta tres obras teatrales adaptadas por Natalio Grueso: 'Muerte de un viajante', 'Lorca por Saura' y 'Equus'. Estas dos últimas ya habían pasado por el Palacio Valdés de Avilés el año anterior, algo que fue muy criticado por los grupos de la oposición debido a la situación judicial del prófugo y su relación por la ciudad. Se acusó al Ayuntamiento de querer blanquearle, en una programación que además se realiza de forma conjunta con el propio Centro Niemeyer.
Solo Javier Vidal, concejal no adscrito, planteó la separación entre las cualidades artísticas de las obras contratadas y los problemas de Grueso con la justicia, pero tanto PP como Cambia Avilés, Vox y Ciudadanos consideraban que sus obras no deberían figurar en la programación, es decir, que Grueso debería ser 'cancelado'.
Pero a lo largo de este último año tanto instituciones públicas como privadas han contratado alguna de estas adaptaciones de Natalio Grueso, desde en Ayuntamiento de Gijón al de Bilbao, donde 'Equus' cerró su gira, pasando por otros en Andalucía, Canarias o Castilla y León. También han entrado en las programaciones de la Fundación Abanca en Galicia y del Cartuja Center que gestiona Eulen en Sevilla.
La cuna de todas estas obras adaptadas por Grueso se encuentra en Madrid, en el teatro Infanta Isabel, propiedad de Ana Achiaga y Antonio del Castillo. y son todas ellas producciones de Okapi, empresa del prestigioso productor avilesino José Velasco.
Algunas de ellas volverán a protagonizar los carteles madrileños, como es el caso de 'Lorca por Saura' con su tercera cantante protagonista. Tras las dos temporadas interpretadas por India Martínez y María Peláe, será María Carrasco quien ocupe el escenario los meses de septiembre y octubre.
Natalio Grueso seguirá así sacando rendimiento económico a los derechos de autor generados, principalmente por estas obras de teatro, pero también por la venta de sus libros. Todavía el año pasado la editorial Samarcanda publicó '¿Qué fue de Macarena Albanta?' Salió a la venta en noviembre, cuando ya pesaba sobre su autor una orden de búsqueda y captura.
En República Dominicana
España no ha sido, no obstante, el único escenario de las obras de Grueso, que también ha visto como otras de sus obras, como 'El coronel no tienen quien le escriba' o 'La fiesta del chivo' encontraban hueco en las programaciones de distintas ciudades de República Dominicana. La última, aún el pasado fin de semana, cuando su adaptación de García Márquez se representó en la Sala Manuel Rueda de Santo Domingo durante tres días.