El Reggaeton Beach Festival excluye Avilés en su programación para el próximo verano

El Reggaeton Beach Festival se ha celebrado ya en tres ocasiones en Avilés. La primera fue en 2022, el primer verano sin restricciones tras la pandemia. Era el cuarto año e historia del festival y Avilés se sumaba a otras nueva ciudades con artistas como Anuel AA, Bryant Meyers o Juan Magán. En aquella primera ocasión se celebró ene l centro Niemeyer, donde se instalaron juegos acuáticos, aspersores, foodtrucks y un sinfín de atracciones para complementar las actuaciones musicales. Aquella edición funcionó bien, y el año siguiente se decidió trasladarlo al pabellón de La Magdalena, donde se repitió este pasado verano de 2024.

Sin embargo, esta última edición del festival en Avilés no parece haber cubierto las expectativas de los organizadores, principalmente las económicas. Ni organización ni Ayuntamiento ofrecieron datos de venta de entradas o asistencia, aunque sí destacaron la presencia de «gente muy joven, adolescentes y menores de 25 años en su mayoría» y anotaron que un «30% del público» había llegado desde fuera de Asturias.

La repercusión para la ciudad ha sido importante, tanto en términos de imagen como económicos. Los cálculos previos a la celebración del evento los pasados 27 y 28 de julio cifraban en unos 770.000 euros el impacto directo, a los que habría que sumar el indirecto. Entre los datos destacados están otros que tienen que ver con 1.500 puestos de trabajo creados en relación al festival y la participación de más de setenta proveedores locales y una quincena de hosteleros que instalaron sus puestos en La Magdalena. Todo eso parecía justificar la aportación municipal de 125.000 euros que se hacía para apoyar su celebración y el esfuerzo promocional realizado también por el Ayuntamiento.

Esa aportación económica, lo mismo que toda la ayuda material y de coordinación ofrecida por el Consistorio ha sido muy agradecida por la organización, pero no resultaría suficiente para que las cuentas salgan en un festival muy costoso, tanto a nivel de infraestructuras, con escenarios gigantes y potentísimos sistemas de sonido, además de los montajes acuáticos, el personal y la seguridad necesarios para garantizar su buen funcionamiento, como por el caché de los artistas que participan, que se encuentran entre los más afamados del género, la mayoría de ellos procedentes del continente sudamericano.

Así, de la gira de este año, de las doce ciudades que participaron el año pasado solo han quedado diez. Han desaparecido dos de ellas, por una parte Avilés y por otra Gran Canaria. Se da la circunstancia de que en ambas el Reggaeton Beach Festival tiene la misma competencia: El Boombastic, que si bien no es un evento del mismo género, los artistas que acuden sí puede cubrir algunos de los gustos musicales del público del RBF.

El Boombastic comenzó a celebrarse en Llanera en 2022, el mismo año que el RBF llegó a Avilés, y se convirtió rápidamente en todo un éxito y el festival más masivo de Asturias. Este último 2024, además, ambos celebraron en fechas muy próximas, coincidiendo ambos en dos fines de semana seguidos a finales de julio, lo que probablemente contribuyó a restar público.

Sea como fuera, aún habría margen para volver a organizar una nueva edición del Reggaeton Beach en la ciudad, pero parece poco probable toda vez que la organización lleva ya semanas vendiendo entradas en otras ciudades y ya ha comenzado a confirmar artistas en las diferentes localizaciones.