AlNorte abre un año más sus puertas como «refugio del arte contemporáneo en Asturias»

AlNorte ya está en marcha. Su decimocuarta edición cortó ayer la cinta inaugural en el Museo Barjola, poniendo marcas cada vez más lejos en un territorio que va creciendo formal, física y también conceptualmente. Un territorio que se constituye en refugio del arte, idea sobre la que sostuvo su intervención el director de EL COMERCIO, Íñigo Noriega, quien habló de esa sensación que la Semana de Arte Contemporáneo promovida por este periódico ofrece como abrigo «frente a la banalidad». Es AlNorte, dijo, «un lugar donde poder expresarse, donde el propio arte, el de verdad, se manifiesta y donde sus fieles tienen un lugar de encuentro». Un mapa, en suma, para disfrutar, para la participación ciudadana. También la de las instituciones, pues AlNorte -que se ponía en marcha estrenando tres exposiciones, en Gijón y Avilés, las de cuatro de los becados de este año- logra que las administraciones y la iniciativa privada unan esfuerzos. «Solo así salen las cosas adelante», advertía el viceconsejero de Cultura, Vicente Domínguez, quien no se quiso perder la primera jornada de programa y elogió «esta iniciativa» como «un impulso del arte que hace posible la construcción del tejido cultural de Asturias». Hasta la gastronomía se sumó a la fiesta inaugural, con un cátering diseñado para la ocasión por el chef Isaac Loya, del Real Balneario de Salinas, que creó una serie de platos basándose en los contenidos artísticos de AlNorte.

No fue el viceconsejero el único que tuvo buenas palabras para este evento que ideó y guía desde hace 14 ediciones el crítico de arte Ángel Antonio Rodríguez. En realidad todos los que ayer se dieron cita en torno a su cartel hicieron idéntico acopio de alabanzas. Desde las galeristas Gema y Diana Llamazares o Adriana Suárez, hasta artistas como Pablo Armesto, Carlota Álvarez, Edgar Plans o Cristina Ferrández, parte activa del programa. También Teresa Monforte, que cuelga obra en el museo y ayer cosechó miradas por AlNorte.

Pero fue especialmente generosa en su loa la concejala de Cultura, Ana Monserrat López, quien habló de esta aventura como «un estimulante ejercicio de diálogo entre objetos, personas y sentimientos». Descripción que vale no solo para los proyectos expositivos abiertos ayer, sino para cada una de las actividades que en los sucesivos días, hasta el sábado, mantendrán el debate del arte al rojo vivo en Gijón, Oviedo y Avilés, pero también en Villaviciosa, Pola de Siero, Lugones y Candás, entre otros lugares.

Las exposiciones

El primero que entró en acción fue el de la Factoría Cultural, de Avilés. Allí comenzó el recorrido inaugural a media tarde, bajo el inmenso abrazo de una instalación de pura lana virgen, tejida, teñida y exprimida en todo su significado por Laura Díez y Soraya Andrés, cuyos trazos, cuyas Fibras, que así se titulada la pieza, buscan reflexionar sobre la propia naturaleza y «lo natural». Tras dar por inaugurada su obra, AlNorte se desplazó a Gijón. Primera parada, Laboral Ciudad de la Cultura. Bajo el llamativo techo que cubre el patio Corintio, el cubano Guibert Rosales ha dado forma a dos piezas que son una, Punto de atracción y Cartas al cielo. Un único discurso sobre la crisis. No la económica, sino la humana, la social. Por eso su centro de atención es una barca varada sin orilla, en cuyo interior un ataúd emite datos de muertes, que ya son solo números y estadísticas. Una metáfora, de la que participa un fusil Kaláshnikov de mármol sostenido por unos globos dorados, que tienen una misión tan difícil como imposible. Al igual que las Cartas al cielo. De cerrar el circuito gijonés, al que se unen hoy, en la sala Borrón de Oviedo (a partir de las 21 horas), Félix Carpio y Román Corbato, se encargó Jorge Nava, el único pintor del grupo de becados. Entre sus telas colgadas y sobre su alfombra desplegada en el centro de la tercera planta de Barjola, tuvo lugar la apertura oficial de todo el programa alnorteño. La otra familia, como titula su proyecto, que también aporta objetos tridimensionales, capaces, dice él, de rendir tributo a las fuentes artísticas de las que se lleva alimentando toda la vida, se comportó como antesala de otra visita en el mismo museo. La que reclama atenciones en las dos primeras plantas con el Perú de Martín Chambi y Castro Prieto, integrado también en esta XIV Semana de Arte.

Pero la apertura de las exposiciones solo es el punto de partida de este nuevo AlNorte, que promete albergar debate, revitalizar espacios y hasta dejar mirar en el interior de algunos de los talleres de artistas principales. Eso será a partir del lunes. Hoy lo que toca es cita con Carpio, Corbato y su Aproximación a la idea de refugio, cuarto proyecto becado, que abre sus múltiples formatos, disciplinas y voluntades a la Noche Blanca de Oviedo.