El Unicaja Oviedo paraliza toda su actividad por un brote de covid-19
La plantilla del conjunto ovetense queda confinada tras el positivo de tres jugadores y los síntomas de otros cinco compañeros más
HUGO VELASCO
OVIEDO.
Martes, 14 de diciembre 2021, 03:01
El Polideportivo de Pumarín acogió ayer una rueda de prensa de esas que nunca se quieren dar. La de ayer, madrugadora, sirvió para que el Unicaja Banco Oviedo anunciara que tres de sus jugadores son positivos por coronavirus y que otros cinco más presentan síntomas compatibles con la covid. Este brote en el seno del club ovetense ha obligado a la suspensión de los entrenamientos del primer equipo y de sus dos próximos encuentros.
«Para nosotros esto es un problema muy grave desde cualquier punto de vista», apuntó el director general del club, Héctor Galán. «Desde el punto deportivo porque nunca es un buen momento para que suceda, pero este especialmente tampoco. Y, desde el punto de vista económico, también porque por delante teníamos tres partidos por Navidad, para los que habíamos hecho un promoción con la que prácticamente teníamos lleno Pumarín los tres días», remarcó.
Las alarmas saltaron en la tarde del sábado. Fue el momento en el que uno de los jugadores mostró síntomas compatibles con la covid. Los servicios médicos de la entidad le realizaron rápidamente un test de antígenos, cuyo resultado fue positivo. Se tomó entonces la decisión de someter, a la mañana siguiente, a una PCR a todos los miembros del primer equipo. Los primeros resultados esa misma tarde confirmaron el positivo del jugador con síntomas y también los de otros dos compañeros, con lo que se decidió desde ese momento suspender toda actividad deportiva.
Los jugadores positivos y los asintomáticos deberán pasar diez días de aislamiento en sus domicilios, ya que, como explicó Paco Callejo, médico del club, «están en perfecto estado, no haciendo falta que ingresen en el hospital de momento». Lo que no está seguro es que la pandemia se quede ahí. Otros cinco jugadores presentan síntomas. «Hay altas posibilidades de que haya más miembros que puedan ser positivos», añadió, por lo que será importante ver cómo transcurren los próximos días. «Vamos a esperar a ver cómo evoluciona este brote en cuanto química y positivos», indicó Callejo.
El club carbayón, una vez conocidos los resultados, envió una comunicación a la Federación Española para informar del brote y solicitar el aplazamiento de los encuentros ante Palencia y Girona, que debían disputarse en Pumarín el sábado 18 y el martes 21, respectivamente. Ayer mismo se recibió el visto bueno por parte del Federación que presidente Jorge Garbajosa.
A la espera de ver cómo evolucionan los miembros de la plantilla y si todo transcurre con normalidad, el Unicaja Oviedo no volvería a jugar, como mínimo, hasta el miércoles 29 de diciembre, también en Pumarín, ante el Palma, en lo que sería el último partido del año.
Este fuerte revés rompe la buena dinámica del Unicaja Oviedo, que, a pesar de la derrota del viernes ante el colista Huesca, se mantiene en la tercera posición de la LEB Oro, en un cuádruple empate a ocho victorias con Granada, Palencia y Lleida, y a un solo triunfo del líder Estudiantes.
«Estas noticias siempre vienen mal», señaló el técnico Natxo Lezkano, quien destacó que estos aplazamientos obligarán al equipo a asumir un sobreesfuerzo en otro momento de la competición. «Al final se acaban pagando las consecuencias de jugar muchos partidos en poco tiempo», hizo hincapié.
Esta temporada, y a diferencia de la pasada, en la que fue una tónica habitual, la LEB Oro había logrado esquivar la pandemia al no haberse aplazado ningún encuentro en las primeras diez jornadas. Y eso a pesar de que la semana pasada el Alicante anunció el positivo del base Pedro Llompart. Pero, a diferencia del brote que afecta al Unicaja, el encuentro de los alicantinos el viernes en Valladolid siguió su curso normal al solo verse afectado un miembro de la plantilla de Gonzalo García de Vitoria.