El cierre de Danone, arma arrojadiza en la Junta
Mallada vincula la decisión de la empresa a las políticas fiscales socialistas y Barbón afea a la líder de la oposición su 'performance' durante su visita a Salas
Solo unos minutos después de aprobarse en la Junta General la declaración institucional en apoyo a los trabajadores de Danone, el presidente del Principado, ... Adrián Barbón, y la líder del principal grupo de la oposición, la popular Teresa Mallada, utilizaron el reciente anuncio por parte de la multinacional del cierre de la planta de Salas como arma política. En primer lugar, la presidenta del PP, Teresa Mallada, afeó al jefe del Ejecutivo que atribuyera este cierre a un «hecho puntual» cuando, recordó, se suma a una amplia lista de empresas que vienen cerrando en Asturias en los últimos años, mil concretamente en esta legislatura. «Los cierres que se producen de forma recurrente son consecuencia de años de políticas socialistas, las empresas no se ponen de acuerdo por avaricia para cerrar», argumentó la portavoz popular, en clara referencia al reproche que Barbón ha realizado públicamente a la dirección de Danone, a la que ha acusado de «avaricia empresarial». Mallada vinculó directamente la decisión de esta y otras empresas que en los últimos años han abandonado la región a la presión fiscal que existe en Asturias, lo que en su opinión lleva a estas firmas a buscar territorios con más «ventajas competitivas». «No es un problema global», insistió Mallada, quien ha exigido a Barbón que se centre en los verdaderos problemas de Asturias en lugar de seguir «erre que erre con sus redes sociales» y organizando «jornadas para promocionar otras comunidades», en relación al encuentro gastronómico celebrado en Laviana en el que el presidente cántabro, Miguel Ángel Revilla, y la anchoa de Santoña tuvieron especial protagonismo.
Durante su turno de preguntas al Presidente en la sesión plenaria, Mallada tiró de datos para advertir del mal posicionamiento de Asturias en creación de empresas y captación de inversiones extranjeras que, como ya viene siendo habitual en estos debates, Barbón contraatacó con sus propias estadísticas, como la desinversión extranjera en 2021, «de cero euros en Asturias». Un rifirrafe ya habitual entre ambos políticos que dio paso a la respuesta por parte de Barbón, quien volvió a tratar de desacreditar a la líder popular asegurando que las encuestas electorales le dan un «empate con Vox». Negó que la deslocalización empresarial tenga nada que ver con la política fiscal del Principado y reprochó a Mallada que, en lugar de enfrentarse a la empresa, dirija sus críticas al Gobierno socialista y se limite a «hacerse una foto con los dirigentes del PP de Salas, que son pocos, frente a la fábrica», sin ni siquiera reunirse con el alcalde, Sergio Hidalgo, de Foro. Una visita a la que, más tarde, Barbón se referiría como una «performance». No pasó tampoco el presidente del Principado por alto el reproche de Mallada a su encuentro con Revilla en Laviana y le recriminó que su discurso se limite a pedir «bajar los impuestos a los ricos», «echar la culpa de todo al Gobierno de Asturias» y «hablar mal de Asturias». «Usted trae invitados, y no pocos, que hablan mal siempre de Asturias. Todos los invitados que yo traigo hablan siempre bien de Asturias», comparó.
Diferente fue el tono del debate generado a raíz de la pregunta formulada por la portavoz de Ciudadanos, Susana Fernández, quien también quiso cuestionar al presidente del Principado sobre sus políticas para atraer a empresas y evitar deslocalizaciones. Fernández alertó también de que las empresas «son la médula de Asturias» y que, sin ellas, «solo nos queda la respiración asistida del empleo público que no genera riqueza, ni productividad». Se interesó, concretamente, por la oficina de captación de inversiones en Madrid, que forma parte del acuerdo presupuestario entre ambas formaciones. «No puedo dar una fecha, pero estamos trabajando a todo ritmo para ponerla en marcha cuanto antes», respondió Barbón. Este insistió nuevamente en el argumento de que la deslocalización de empresas no está relacionada con la política fiscal y puso en valor al Principado por sus recursos naturales, comunicaciones, personal cualificado y tejido industrial previo. Un cóctel que, en su opinión, ha hecho que empresas como Amazon hayan elegido esta región para su desarrollo.
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