El Ejecutivo no decidirá hasta el otoño qué proyectos optan a los fondos europeos

Cofiño compareció a petición propia para informar acerca del trabajo que está realizando el Gobierno regional en relación con el llamado Fondo Next Generation, que supondrá la entrada de 140.000 millones de euros en España para hacer frente a la crisis económica derivada de la pandemia. Pero sus explicaciones no convencieron a la oposición, e Izquierda Unida llegó a catalogar de «ambigüedades» los datos aportados por el consejero.

El Gobierno del Principado tiene sobre la mesa 195 proyectos susceptibles de ser financiados con cargo a los fondos europeos. Pero dichos proyectos se encuentran todavía en fase de evaluación, pese a que la Unión Europea ya aprobó en noviembre del año pasado la emisión de este paquete de ayudas, histórico por el volumen de dinero que se movilizará. «Entiendo la ansiedad y la expectación. Pero creo que el momento de las concreciones será en otoño».

Juan Cofiño defendió, aun así, que «hemos avanzado mucho» y que «los fondos se gestionarán en tiempo y forma». Es más, se comprometió «a intentar mejorar la gestión que se hizo de los fondos mineros» en su momento, y que algunos partidos criticaron abiertamente durante la comisión. «Si somos capaces de presentar proyectos buenos y de gestionar bien los fondos, podríamos recibir un plus de financiación», aspira el Gobierno autonómico.

Aunque sin entrar en detalles, Cofiño sí adelantó que «se han planteado proyectos muy importantes» en relación, sobre todo, con el sector de la economía circular, la transición energética, el cambio de modelo industrial, los procesos de digitalización, la agroalimentación y el turismo. «Habrá más proyectos que dinero a repartir», señaló.

De ahí que el Ejecutivo del Principado albergue la intención de encauzar hacia otras líneas de financiación aquellas iniciativas que puedan ser interesantes para Asturias y no encajen en los requisitos marcados por la Unión Europea para estos fondos de recuperación. Buena parte de las iniciativas que ahora son objeto de estudio por parte de la Administración autónomica son fruto de la colaboración público-privada y Cofiño entiende que, en la medida de lo posible, no deberían caer en saco roto: «Es que la iniciativa privada se está volcando».

Los fondos europeos, una vez recibidos, se ejecutarán desde las diferentes consejerías y, para canalizar ese nuevo caudal presupuestario se va a reforzar la plantilla con perfiles profesionales en los que la Administración autonómica tiene ahora carencias. «Fundamentalmente en materia de contratación pública», apuntó el consejero de Administración Autonómica, Medio Ambiente y Cambio Climático.

Este programa de refuerzo temporal de la plantilla también se encuentra en proceso de diseño. Como el proyecto de ley que, a través de varias reformas legislativas, procurará una mayor agilidad de las contrataciones públicas o la ley de calidad ambiental, que permitirá resolver «el embudo» que actualmente entorpece la tramitación mediambiental.

A la derecha asturiana, en cualquier caso, le preocupa la capacidad de respuesta del Gobierno ante el desafío económico que se plantea ahora que la crisis sanitaria empieza a contenerse. Incluso se instó al vicepresidente del Ejecutivo asturiano a «romper la burbuja» generada en torno a unos fondos de los que el propio vicepresidente del Gobierno regional aseguraba ayer que «tampoco van a ser el bálsamo que lo va a curar todo».

En cualquier caso, «sí que nos abren una ventana de oportunidades», defendió también Juan Cofiño, para acto seguido asegurar que «el Gobierno de Asturias está preparándose a conciencia para la transformación» que se avecina. Para el Principado son prioridades la digitalización y la transformación del modelo industrial asturiano. Y el consejero recordó en ese sentido que «Asturias es una de las ocho comunidades autónomas seleccionados para los fondos de transición ecológica justa», lo que conllevará otro aporte presupuestario adicional.