Los salarios pierden casi 850 euros de poder adquisitivo en un año por la alta inflación

Sin embargo, este máximo salarial no implica más poder adquisitivo en los bolsillos de los trabajadores españoles, como pudiera pensarse. Al contrario, cuando salen a hacer la compra, pueden adquirir bastantes menos cosas que un año antes pese a tener más dinero debido a la escalada de la inflación, que llegó a elevarse a doble dígito el verano pasado y marcar máximos en tres décadas. Concretamente, si descontamos la variación de los precios al consumo, en 2022 el salario medio perdió un 4% de capacidad de compra, lo que equivale a 70 euros al mes menos, 843 euros anuales menos, según recoge el IX Monitor Adecco sobre Salarios publicado ayer.

Y no se trata de un hecho puntual debido a que la inflación se ha disparado en el último año a consecuencia de la guerra en Ucrania. Los trabajadores tienen ahora menos poder adquisitivo que en 2017 e incluso que en 2008, cuando estalló la gran crisis financiera, según destaca este estudio. Así, a lo largo de los últimos cinco ejercicios se acumula una caída en el poder adquisitivo de la remuneración media del 2,5%. Ese recorte equivale a una pérdida de casi 44 euros por mes o 523 euros por año en comparación con 2017. Y si se comparan con los datos de 2008, estos resultados empeoran, ya que la capacidad de compra del salario medio de 2022 es un 7% más baja que la de 2008.

En los últimos cinco años todas las comunidades autónomas han perdido poder adquisitivo, aunque no en la misma medida. Asturias se sitúa en tercer lugar de esta pérdida, con un -5,6%, tras Castilla-La Mancha que sufrió un recorte del 6,1%, y Cantabria (-5,9%). En cuarto lugar se situó La Rioja (-5,2%). En el lado contrario, Cataluña es la que menos ha perdido (-0,4%).

Si se analiza por sectores, el salario medio perdió poder de compra en los tres grandes sectores económicos a lo largo de 2022. La construcción fue la más perjudicada, con una reducción del 5% que se traduce aproximadamente en 1.022 euros menos al año. La industria fue el siguiente, con una caída del 4,6% que supone 1.088 euros anuales menos. Y el sector menos afectado fue servicios, con un recorte del 3,8% que se traduce en una pérdida de 772 euros anuales.

Pero también hay grandes diferencias salariales, además de por sectores, por el tamaño de la empresa: cuanto más grande es, mejor salario. Frente al promedio general de 1.822 euros por mes, las empresas de tamaño grande logran una remuneración media de 2.127 euros mensuales, es decir, 305 euros por encima de la media. En cambio, las empresas pequeñas se sitúan en una media de 1.549 euros por mes (273 euros por debajo de la media), y las empresas de tamaño medio alcanzan los 1.919 euros (97 euros por encima de la media).

Así, la brecha entre las compañías de mayor tamaño y las más pequeñas en 2022 es de aproximadamente 578 euros por mes, 6.939 euros al año. Esta diferencia expresada en términos porcentuales equivale al 37%, mientras que en 2021 fue del 41% y, si nos remontamos a 2017, era del 45%, por lo que se ha ido reduciendo. Lógicamente, un trabajador a jornada completa gana más que el que está a parcial: 2.095 euros brutos al mes, frente a 863 euros mensuales. Sin embargo, en el periodo 2017-2022 el poder de compra de la remuneración media de jornada completa cayó un 4,3%, mientras que la de la jornada parcial se incrementó un 2,4%.

Por ramas de actividad, la mayor subida en el salario medio fue el de la hostelería, que se impulsó un 28,4%. Con este fuerte aumento logra superar el salario medio de 2019 y alcanza los 1.186 euros mensuales. Sin embargo, continúa siendo la sección con menor salario.