Los bomberos intervienen en el colegio derrumbado en Gijón
Barajan la posibilidad de derruir la cornisa agrietada para prevenir mayores daños en el edificio del San Vicente de Paúl
Alrededor de las cuatro de la tarde el camión escalera de Bomberos y una patrulla de la Policía Local de Gijón, así como representantes municipales y técnicos de Urbanismo se desplazaron al cruce de la calle Ezcurdia con la calle Caridad para evaluar el estado del edificio del colegio San Vicente de Paúl. Allí fallecieron el pasado día 5 dos obreros, David y Andrés Velasco, que se encontraban cambiando un falso techo del piso superior cuando la cubierta cedió y los escombros los sepultaron.
Habían sido varios los vecinos que habían alertado a la Policía Local del estado de las grietas de la cornisa afectada por el derrumbe del pasado día 5. Tras subir con el camión escalera y estudiar el estado de las grietas, se decidió movilizar a más vehículos de Bomberos equipados con el material necesario para derribar la cornisa agrietada y prevenir mayores daños. No obstante, por el momento no se ha determinado si la operación se podrá llevar a cabo hoy o se esperará a la próxima jornada para efectuarla a plena luz diurna.