Crimen en Gijón: el cadáver de Susana González fue rociado con una sustancia corrosiva y la autopsia apunta a un crimen

Los resultados provisionales de la autopsia sustentaría la detención del individuo en cuya vivienda fue hallado el cuerpo. La investigación apunta a que mató a la mujer, con el que al parecer mantenía una relación sentimental desde hacía un tiempo, y ocultó su cadáver en un cubo en el pequeño piso en el que vivía de alquiler, a escasa distancia de la plaza Mayor. Allí habría hecho vida 'normal' durante todo ese tiempo, hasta que fue arrestado por la Policía Nacional y se localizó el cadáver en descomposición.

El detenido, con un amplio historial policial, tenía previsto ser puesto ayer a última hora de la mañana a disposición del juzgado de Instrucción número 2, en funciones de guardia. Sin embargo, durante la mañana sufrió un brote psicótico por el que tuvo que recibir asistencia psiquiátrica. Presentaba una alteración mental que hizo imposible el traslado desde los calabozos de la Comisaría hasta el Palacio de Justicia. Finalmente ha sido personado ante la jueza en la mañana de hoy jueves, que ha decretado su ingreso en prisión.

El Ministerio de Interior recoge en sus estadísticas la muerte de Susana Sierra como un nuevo caso de violencia machista, ya que existen certezas de que la víctima mortal y el sospechoso del crimen mantenían una relación sentimental.

La Delegación del Gobierno, el Gobierno del Principado y el Ayuntamiento de Gijón hicieron pública ayer una declaración institucional «ante el asesinato machista». «Queremos manifestar nuestra más enérgica condena y rechazo, así como nuestro apoyo y cercanía hacia el entorno de la víctima, poniendo a su disposición los recursos psicológicos, jurídicos, sanitarios, de protección y de acogida que requiera», señalan. «Desde el momento que se ha tenido noticia sobre el caso, las tres administraciones hemos trabajado de forma coordinada la respuesta institucional y la atención a su familia y entorno. La violencia machista es una grave vulneración de los Derechos Humanos ante la que nadie puede ser indiferente», añaden. Está convocada una concentración de condena a las 18 horas de hoy jueves delante del Ayuntamiento de Gijón.

Al parecer, Susana y el sospechoso de acabar con su vida habían iniciado una relación sentimental hacía poco tiempo. La mujer tenía una pareja estable y un hijo que había tenido de un primer matrimonio. Fue precisamente su hijo quien interpuso la denuncia por la desaparición de su madre en la Comisaría a principios de mayo. Para entonces, Susana ya estaría muerta.