«A mi hijo le dieron algo y le robaron», dice la madre del joven que murió en un piso de citas de Gijón
El juez toma declaración a las dos mujeres investigadas por posible omisión de socorro y de robar a Saúl Rodríguez una vez muerto
El juzgado de Instrucción número dos de Gijón tomó ayer declaración a dos mujeres en el marco de las investigación por la muerte de Saúl Rodríguez, el joven de 24 años localizado en octubre en el rellano de un piso de citas, en la calle Avilés, semidesnudo y tras sufrir convulsiones por un fallo multiorgánico cuyo origen determinará la autopsia forense.
A las puertas de los juzgados de Gijón se vivieron ayer momentos de tensión entre las mujeres investigadas (trabajadoras del piso de citas) y la familia del fallecido. La madre del joven llegó al palacio de justicia con una foto de su hijo, y se la mostró en repetidas ocasiones a las investigadas, tal y como puede verse en la imagen que acompaña a esta noticia. Las mujeres trataron en todo momento de no mostrar su rostro.
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En declaraciones a la TPA, María del Carmen Iglesias, madre del joven fallecido hizo públicas sus sospechas, tal y como ya hiciera días atrás en EL COMERCIO, de que no solo no le ayudaron en el momento que comenzó a convulsionar, sino que se deshicieron del cadáver y le robaron 3.000 euros. «A mi hijo le dieron algo y le robaron. Hay varias transferencias nominales desde su teléfono. Tres a nombre de una de ellas y otras tres, de la otra», sostuvo a la puertas del juzgado.
La madre apuntó también a que su hijo había sido drogrado esa noche. Por el momento no se han conocido el resultado de la autopsia. «Tenemos que esperar pero en el piso había de todo», insistió.
Con las investigaciones aún bajo secreto de sumario, el juez investiga si las mujeres incurrieron en un delito de omisión de socorro y robo. Los agentes de la Policía Judicial recabaron pruebas en el lugar y se procedió a precintar la vivienda para que sea inspeccionada de forma exhaustiva por la Brigada de la Policía Científica. Se investiga si el joven salió por su propio pie buscando ayuda o si las mujeres lo sacaron al rellano. El piso quedó precintado por orden judicial y custodiado por agentes de Seguridad Ciudadana para evitar que nadie pudiera entrar.
Fueron precisamente dos chicas de origen latinoamericano que se encontraban las que salieron de forma precipitada a la calle en busca de un teléfono con el que alertar al 112 de la grave indisposición que estaba sufriendo el joven.
La investigación sigue abierta, y ni siquiera el Ministerio Fiscal ha hecho públicas sus conclusiones de la investigación. Mantiene el fiscal del caso que aún es un fase «incipiente». Será clave conocer la causa del fallo multiorgánico que le costó la vida a Saúl Rodríguez.
