La joven acusada de matar a su bebé en Nuevo Roces afronta prisión permanente

La fiscalía solicita por primera vez en Asturias la prisión permanente revisable. Silvia A. M. afronta la pena más dura recogida en el Código Penal acusada de matar de 53 puñaladas a su hijo recién nacido, al que, presuntamente, arrojó a un contenedor frente a su casa de Nuevo Roces dentro de una mochila y con el cordón umbilical y la placenta aún colgando. Está considera autora de un delito de asesinato con alevosía, «al ser la víctima especialmente vulnerable por razón de su edad».

El ministerio público sostiene que, «en la mañana del 1 de agosto de 2019, la acusada, cuando estaba sola en su vivienda, en la que residía con su compañero sentimental, dio a luz a un bebé vivo de 2.670 gramos de peso, de sexo varón, siendo su embarazo a término». Ese mismo día, prosigue en su escrito de acusación, «con la intención de acabar con la vida del bebé y antes de las siete de la tarde, hora a la que su compañero sentimental regresaba del trabajo, la acusada, utilizando un cuchillo de cocina, asestó al bebé 53 puñaladas en distintas partes del cuerpo, que le provocaron la muerte».

Después de matarlo, «metió al bebé, unido por su cordón umbilical a la placenta, en una mochila, que tiró con el cuerpo dentro en el interior de un contenedor de basura situado en la misma vía, todo ello antes de que regresara su compañero sentimental. El bebé fue encontrado por un ciudadano la noche del día siguiente, a las 2:30 horas aproximadamente, dentro del contenedor».

Silvia A. M. «había ocultado el embarazo a su pareja sentimental y a todas sus amistades y familiares, por lo que nadie conocía su estado». «En el momento de los hechos su pareja se encontraba en el trabajo y le mintió por teléfono y cuando volvió a la vivienda, ya que le dijo que la sangre que había por distintas zonas de la casa era a consecuencia de un sangrado masivo que había sufrido por un quiste en un ovario. Tras la exploración ginecológica con posterioridad al hecho realizada a la acusada por el servicio de ginecología del HUCA se comprobó que no tenía ningún quiste en los ovarios», concluye el ministerio fiscal.

No solo exime de cualquier responsabilidad al novio de la procesada -padre biológico- del bebé asesinado, sino que solicita que ella le indemnice en 50.000 euros por los daños psíquicos provocados.

El progenitor del recién nacido muerto, detenido en un primer momento y exonerado durante la fase de instrucción judicial, ejerce la acusación particular en el procedimiento, cuyo juicio se celebrará previsiblemente en la primavera de 2021.

La mujer, de 29 años, no presenta ninguna patología psiquiátrica, según los forenses que evaluaron su estado mental tras el arresto que tuvo lugar el 21 de septiembre, uno mes y medio después del macabro hallazgo que conmocionó no solo al barrio de Nuevo Roces en el que vivía la pareja, también a toda la región, consternada por el terrible crimen del neonato. El cadáver del niño ya ha sido entregado al padre después pasar de un año en el depósito judicial.