El violador de Somió se resistió fuertemente a los policías durante la intervención y acabó ingresado en el HUCA

El individuo cuenta con antecedentes y tiene un carácter violento y narcisista. Las últimas semanas residía en un piso compartido en el barrio de Laviada y fue allí donde fue lo detuvieron a primera hora de la mañana del domingo en medio de un amplio despliegue policial tras dieciocho días de trabajo frenético de la Comisaría de la Policía Nacional de Gijón con apoyo de la Comisaría General de Policía Judicial de Madrid.

B. S. M. prácticamente a diario las zonas de La Providencia y Somió, donde consumó el ataque. Lo hacía a bordo de su moto de gran cilindrada, que, al parecer, quedó recogida en grabaciones de cámaras de seguridad del entorno. El hombre, de 44 años, es asturiano, si bien pasó temporadas viviendo en Zaragoza. Originario de Oviedo, pasó su juventud con sus padres en el barrio de Roces, donde estudiaba en el instituto.

Sin trabajo conocido, los vecinos del edificio en el que vivía últimamente lo definen como «una persona muy callada y que no se relacionaba con nadie». Ni con los vecinos ni con prácticamente ningún amigo ni familiar. Hacía vida prácticamente en solitario, con un carácter introvertido y con rasgos narcisistas de los que hacía gala en sus redes sociales, mostrando su torso desnudo subido a la moto que había comprado hacía pocos meses.