Marcelino Menéndez, el andariego

Así, de este modo, Marce Menéndez, fue ganando nombre y demostrando sus dotes de político cabal, culto, conciliador y con buen sentido, trabajando, sin mayores desencuentros, en las entonces difíciles batallas de la promoción cultural y social de Candás y su concejo, precisamente en un tiempo donde el cambio político, tras la muerte de Franco, suponía la complicada toma de un poderoso castillo que debía reconstruirse en paz y con prudencia desde la democracia.

Así empezó este andariego su vida de concejal, terminada la cual se incorporó como funcionario en la Delegación de Hacienda de Gijón hasta su jubilación. Y este (el de su jubilación) es el momento en que nuestro amigo Marce empieza a recorrer otros caminos. Caminos por nuestro Concejo de Carreño, que él conoce muy bien. Caminos y vericuetos, tabaxeos, playas y pedreos como caminante o andariego, con mochila, cámara, perro y pantalón deshilachado o algo así.

Es tirarse al monte en el mejor sentido de la palabra. Porque, este andariego, lleva años retratando con su Koda la flora y fauna de Carreño por tierra, mar y aire, además de ilustrarla con textos y comentarios dados sus conocimientos en biología.

En su libreta de campo hay, pues, todo un tesoro que Carreño no puede perder. Flores y arbustos, árboles, pájaros y especies marinas de costa y playa, casi algunas desaparecidas, mariposas y abejas, ¡qué sé yo! Todo un espléndido material para formar un gran libro, ¡ojalá!, con la flora y la fauna, mayor y menor, de nuestro Concejo de Carreño recopilada durante años por este andariego candasín, nacido en la Ribera, a la misma rexa de la mar