Adiós a Cristina García-Pumarino, una edil «leal y trabajadora»
Concejal de Foro entre 2011 y 2015, siempre se mantuvo al margen de los conflictos y trató de «mejorar la vida de los ovetenses»
El fallecimiento de Cristina García-Pumarino ha causado una profunda tristeza entre compañeros de partido, Foro, y el resto de miembros de la corporación de la que formó parte entre 2011 y 2015. «Era una persona leal, trabajadora, alegre, generosa y simpática», coinciden todos aquellos que trataron y compartieron con ella mandato municipal.
Cristina García-Pumarino falleció este lunes a los 70 años. Se hizo más conocida, en lo público, por su labor municipal como concejal con Foro; pero su actividad central se desarrolló en el Registro de la Propiedad, donde trabajó hasta jubilarse. Los últimos años de su vida sufrió una enfermedad degenerativa que la apartó de sus rutinas. Casada con el abogado Carlos Díaz-Varela Betancourt, era madre de dos hijos, Beatriz y Carlos, y abuela de dos nietos. El funeral por su eterno descanso será este viernes, a las seis de la tarde, en la Basílica de San Juan El Real.
Los cuatro años que fue concejala en el Ayuntamiento fueron intensos. Con el grupo municipal de Foro dividido, Cristina García-Pumarino intentó y hasta consiguió no abrir las heridas internas ya graves y cerrar con trabajo diario las diferencias entre las facciones del partido.
Arturo González de MesaExconcejal de Foro «Simpática, leal y generosa. Se mantuvo al margen de las capillas de Foro y nunca ejerció contra nadie»Juan Pérez ZaldívarExconcejal de Foro «Era una buena persona muy preocupada por Oviedo y muy trabajadora. Una pérdida muy grande»Gerardo AntuñaExconcejal del PP«Educada, amable y siempre pendiente de hacer bien las cosas. En resumen, una buena persona»Alfredo CarreñoExconcejal del PSOE«Era una mujer muy trabajadora, alegre, colaboradora y con una actitud muy positiva, muy cariñosa»Alejandro SuárezConcejal de IU«Muy afable en el trato cercano, con una gran virtud personal que era la absoluta carencia de maldad política»
Arturo González de Mesa, compañero de corporación en Foro de 2011 a 2015, y portavoz municipal del grupo mostró ayer su respeto y cariño por la fallecida: «Siempre se mantuvo al margen de las capillas del grupo municipal de Foro, nunca ejerció contra nadie y fue leal al programa fundacional del partido». En el plano personal, González de Mesa definió a García-Pumarino como «simpática, leal y generosa. Siempre he tenido muy buena relación con su marido, aunque en los últimos tiempos le veía menos, me imagino que estaba ocupándose de su esposa».
Juan Pérez Zaldívar, también compañero de grupo municipal en Foro, aseguró que «era esperado su fallecimiento pero eso no quita para que la pérdida sea muy grande». Definió a la política como «leal, buena amiga y buena compañera. Una buena persona muy preocupada por Oviedo y muy trabajadora». Y añadió: «Estudié con sus hermanos y teníamos muy buena relación pues la familia vivía en Santa Susana y la mía en Cabo Noval». «Estaba muy emocianada con sus hijos y sus nietos aunque últimamente ya la veía poco», señaló.
Cristina García-Pumarino no sólo dejó huella en su partido, también en los compañeros de Corporación de otros sesgos políticos. Así, Gerardo Antuña (PP) –uno de los concejales más longevos en el cargo en el periodo democrático español a pesar de su juventud, aunque ahora fuera de la Corporación–, tuvo palabras de reconocimiento a la figura de la edil de Foro: «Educada, amable, siempre pendiente de hacer bien las cosas y una persona con la que se podía hablar y llegar a acuerdos». Y añadió: «Siempre dispuesta a mejorar la vida de los ovetenses. En resumen, una buena persona».
En el PSOE coincidió con el portavoz socialista de aquella época, Alfredo Carreño, ahora jubilado. «Era una mujer muy trabajadora, alegre y con una actitud muy positiva, muy cariñosa. El recuerdo que tengo de ella es todo muy positivo, muy colaboradora».
De esa época de concejalía de 2011 a 2015 era también el ahora concejal de IU-Convocatoria por Oviedo, Alejandro Suárez, que recordó ayer perfectamente la figura de García-Pumarino porque «tuve mucha relación con ella y teníamos una relación de afecto». Para Suárez, la concejala era una persona «muy afable en el trato cercano con una gran virtud personal que era la absoluta carencia de maldad política. Ha sido una gran pérdida y desde aquí quiero darle el pésame a su familia. Era muy buena gente».
El concejal de IU aseguró, además, que Cristina García-Pumarino «no era nada sectaria, se implicaba a tope en los problemas y llevaba muy mal las tensiones que existían en el grupo municipal de Foro». Una mujer, como la definieron los compañeros en la política, afable, amable y trabajadora.