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El alcalde llama a trabajadores y a la empresa a poner fin a la huelga de TUA

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La marquesina de la parada Uría Centro, con una larga fila de usuarios a punto de subirse a un vehículo de los servicios mínimos. ÁLEX PIÑA

El alcalde llama a trabajadores y a la empresa a poner fin a la huelga de TUA

Veintiún autobuses cumplen con los servicios mínimos en una jornada de parón sin percances y con retrasos de hasta dos horas en varias líneas

ALBERTO ARCE

OVIEDO.

Miércoles, 19 de diciembre 2018, 02:55

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Con largas colas en las paradas más concurridas, caras de angustia, y varios enfados al no disponer algún usuario de un hueco en los autobuses, que llegaban abarrotados a las marquesinas. Así vivió la ciudadanía, durante la mañana de ayer, la tercera jornada de huelga de TUA, que arrancó a las 7 de la mañana con una prestación del servicio del 30% (tan solo 21 coches en marcha de los 64 disponibles), y unos tiempos de espera de hasta dos horas. Una jornada en la que el alcalde de la ciudad, Wenceslao López, llamó a las partes en una reunión por separado y les pidió poner fin a la huelga.

Sobraba tiempo para esperar y faltaron varias letras del abecedario para cumplir las demandas de algunos clientes. «Tengo un examen en menos de una hora», explicó, nervioso, el estudiante universitario Julián Gómez, tras treinta minutos sin noticias del C2 (Lugones - Facultades). Algo parecido le ocurrió a Natalia Marina, que ya se había tomado varios minutos de los «cinco de cortesía» para llegar a su lugar de trabajo.

Mientras tanto, en la plaza del Ayuntamiento, los huelguistas ahogaban con silbidos y estruendosos petardos las intervenciones del Pleno municipal de ordenanzas fiscales, que se celebró pasadas las nueve de la mañana. Todo cuando la parte social y la empresa estuvieron anteayer encerrados durante cinco horas en el Servicio Asturiano de Solución Extrajudicial de Conflictos (Sasec) negociando, pero sin avance alguno, sobre el punto que los trabajadores consideran fundamental para poner fin a la protesta: el descanso en jornada. Algo que la compañía ya señaló como uno de los principales escollos de la negociación. Con todo, insistió en señalar que el comité de empresa sigue oponiéndose a la implantación del sistema de 'alcolok', que inutiliza los coches cuando hay un positivo por alcoholemia, y quiere que sea «un sistema de prueba y voluntario» para los conductores.

Más tarde, miembros del comité de empresa y responsables de la compañía se reunieron, por turnos, con el regidor, que solicitó a las partes la puesta en marcha de «una negociación firme y continuada». De no haber acuerdo, el calendario aún recoge cuatro paros más: el 27 de diciembre y los días 2, 3 al 4 de enero. La empresa, por su parte, explicó al primer edil que a partir del día 26, al constituirse la mesa electoral con vistas a las elecciones al comité de empresa convocadas por USO para mediados de enero, «se dificultará aún más el acuerdo».

La vicealcaldesa, Ana Taboada, exigió a la empresa una «mejora» de la situación de la plantilla. Según sus palabras, la concesionaria ha incrementado sus beneficios desde la llegada de este gobierno; beneficios «que habrán de revertir en los trabajadores». La concejala de Patrimonio, Cristina Pontón señaló, por su parte, lo «incomprensible» de la postura de TUA. Y el edil del PP, Gerardo Antuña, insistió en la «necesidad» de que haya un «arbitraje» entre las partes.

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