Un gigante de 38 toneladas para las misiones de apoyo al combate

Para ello, este gigante a cadenas de entre 38 y 42 tonelada y ocho metros de largo, diseñado por el consorcio Tess Defence sobre la conocida base del Ascod 2 de Santa Bárbara Sistemas (que el Ejército denomina Pizarro y del que ya posee más de dos centenares y medio de unidades), contará con versiones portapersonal, defensa contracarro, puesto de mando, carga y carga blindada, observador avanzado, ambulancia, zapadores, recuperación y hasta uno capaz de montar un mortero pesado de 120 milímetros. En cuanto al resto de especificaciones técnicas, y a falta de los previsibles cambios que se puedan ir introduciendo en el programa a lo largo del tiempo para adaptarlo a nuevas necesidades o tecnologías, alcanzará los 74 kilómetros por hora, tendrá una autonomía de 450 kilómetros en carreteras pavimentadas y estará dotado con un sistema de misión modular, con un potente blindaje de protección balística y contraminas -y otros artefactos explosivos improvisados- similar al del 8x8 y los últimos sistemas de alertadores láser, ayuda a la conducción y conciencia situacional.

La propuesta con la que Tess Defence se ha hecho con el programa -ya presentaron un prototipo a Defensa a lo largo de este año que hizo las delicias del departamento- también plantea introducir en la plataforma nuevas tecnologías como el mantenimiento predictivo y el 5G, un sistema de protección activa, cadenas de goma y hasta compartir sistemas con el 8x8 Dragón como la estación de armas de Escribano, e incluir el sistema de gestión de campo de batalla y las comunicaciones de Indra.

Cada una de las cuatro patas del consorcio se encargará de diversos trabajos muy específicos. Sapa, tal y como han explicado fuentes de la compañía a través de una nota de prensa, será responsable del diseño y suministro del grupo motopropulsor que incorpora una transmisión de alta tecnología dentro del programa. Algo que, advierten, supone un gran salto tecnológico e industrial que posiciona a la empresa como «líder del mercado de defensa» en este segmento.

Con ello, amén de los modernos sistemas de comunicaciones de Indra y las estaciones de armas de Escribano, Santa Bárbara se encargará de crear los vehículos desde cero en la fábrica de armas de Trubia y de integrar los diversos sistemas y desarrollos tecnológicos del resto de compañías para que los blindados salgan «rodando» del taller al Ejército de Tierra.