Guía para la Noche Blanca de Gijón
Gijón suma hoy cerca de 50 actividades en diversos rincones de la ciudad, que no cierra cuando salga la Luna. Arte, poesía, cuentos, teatro, performances, música, cine y gastronomía para todos los gustos y edades
Paché Merayo
Viernes, 25 de septiembre 2015, 13:22
Hoy, cuando los relojes apunten hora de cierre, lejos de echar la llave las puertas se abrirán de par en par. No en zapaterías, ni en tiendas de tornillos, sí en los lugares, en los muchos lugares, que Gijón dedica a la cultura. 19 espacios, con un programa que suma cerca de 50 actividades, se unen esta Luna bajo la Noche Blanca.
Estar en todos exigiría el don de la ubicuidad. Sin él, la clave está en hacerse una ruta. Prácticamente todas las propuestas dan comienzo a las ocho de la tarde, por lo que el horario no permite priorizar. Lo haremos, entonces, atendiendo al mapa. La primera parada, Deva, en las naves de Altamira ATM Contemporary. Su exposición de Kepa Garraza, que describe el final del mundo tal y como lo conocemos, es una de las que no hay que perderse. Allí habrá música de dj programada para apuntalar el discurso apocalíptico del pintor. Parecida oferta musical hace Adriana Suárez en la calle de la Merced, 11. En sus paredes, Oliver Johnson.
Visitadas ambas el reloj estará acercándose ya a las nueve y media y a esa hora, sin salir de la Merced (45), hay cita ineludible con Miguel Mingotes, en Cornión. En realidad ante su fachada. Dentro esperan mirada las pinturas de Rafa Rollón. Fuera, el poeta visual cosechará, seguro, aplausos. Esta vez hablando del Ratón Pérez. Después de él, también música. La de Mus Musculus. Jazz, swing, charlestón. Esos serán sus ritmos, pero la noche tendrá otros muchos.
En La Salita (Manuel Llaneza, 44), por ejemplo, sonará el flamenco. Saldrá de la guitarra de Nene Suárez y de los volantes de Mónica Nuñez y Miriam Chamoro. Pero más cerca de Cornión, en Van Dyck (Casimiro Velasco, 12), volverá de nuevo el jazz.
Entre sus paredes, el arte de 34 años de oficio se podrá disfrutar con juegos, teatro, performance, cava y tentempiés. Y es que el paladar también está invitado en esta noche interminable. A pocos metros, la sala Bea Villamarín (SanAntonio, 5) ofrecerá un coctel que pretende devolvernos al París de finales del siglo XIX. La misma intención tiene el comentario que espera a los visitantes sobre un cuadro de Toulouse Lautrec, a cargo de Marta Muñiz.
Otro de los escenarios con catering es Espacio Líquido (Jacobo Olañeta, 5), que convida igualmente a cervezas elaboradas para la cita. Degustarlas será posible entre la Materia y distancia de Paco Nadie, viendo el documental Pelansi o escuchando a Ffridrigo. La opción perfecta si se busca folk, country y blues. Si las expectativas van por el soul, el lugar es Vicki Blanco.
El Arte de lo Imposible, en la misma calle (número 10), donde la actuación musical acompañará la obra de Emma Fernández, que guiará a los visitantes. Si lo que se busca es fusión de sonidos, hay que situarse entre las fotografías monumentales de PabloGenovés.
En Aurora Vigil-Escalera (Capua, 21), además de arte habrá música de diferentes latitudes y hasta sonidos experimentales, además de trucos de magia y un circo ilustrado, que suma arte y literatura para niños de 6 a 12 años.
Y la próxima semana, en Oviedo
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El próximo sábado, la aventura nocturno cultural se traslada a Oviedo. Allí con la reapertura delCentro de Arte Moderno que habita bajo el TeatroCampoamor, el programa queda definido en 27 escenarios. Desde el Museo de Bellas Artes hasta la plaza del paragüas, que aportará al calendario un maratón musical.
Por cierto para esta aventura hay que reservar plaza. También en Telefónica. Su sede de Pumarín mostrará sus entrañas, pero antes hay que pedir cita.
No hace falta en Mediadvanced (Jovellanos, 3), donde espera otra degustación gastronómica de autor con el coctel de Noche Blanca, una performance y fotos de varios creadores. Varios son también los que construyen las Vitrinas de los espacios públicos. Isabel Cuadrado las abre en el Antiguo Instituto, donde, además, Laboral propone vista trasladada a Ready (media); Maite Centol en el Museo Jovellanos, y Ramón Isidoro en las Termas del Campo Valdés.
Pero si hay otra geografía de señal necesaria en la ruta es la de Gema Llamazares (Instituto, 23). Dentro y a las puertas de su espacio la parada es obligatoria. Allí aguarda el mundo fantástico de Fernando Guitiérrez, que con La ciencia imaginada, creada a partir de dibujos de la colección del Real Gabinete de Historia Natural, reflexiona sobre la realidad y la vida.