Cascos asegura que pactó su sueldo con el partido para mantener su poder adquisitivo
Insiste ante la jueza en que el local alquilado a su mujer en Madrid se usó como sede y califica de «ridículamente falsas» las acusaciones sobre su gestión al frente de Foro
ana moriyón
Jueves, 24 de septiembre 2020, 00:52
Francisco Álvarez-Cascos declaró durante más de cuatro horas en el Juzgado de Instrucción número 2 de Oviedo como investigado por un presunto delito de apropiación indebida y administración desleal. El fundador de Foro y expresidente del Principado calificó las acusaciones por parte del equipo liderado por Carmen Moriyón, actual presidenta del partido, de «ridículamente falsas» y enmarcó la querella en relación a la gestión de los fondos de la formación durante su etapa al frente en una vendetta política. Quiso incluso situar el origen de esta trifulca en la votación a la que se sometió hace justo un año la Comisión Directiva del partido para acordar que Foro concurriera a las elecciones generales del 10-N, donde quedaron claramente posicionados los dos sectores del partido.
Quien fuera vicepresidente del Gobierno central negó de esta forma cualquier ilegalidad y trató de justificar el coste que ocasionó al partido desde su fundación hasta 2019, y que la actual cúpula cuantifica en 1,8 millones de euros. Argumentó que su sueldo, calificado de «absolutamente abusivo» en la querella, responde a un acuerdo previo para liderar el proyecto político por el que exigió mantener su poder adquisitivo y su lugar de residencia en Madrid. Un acuerdo que, según declaró, incluía los honorarios en concepto de conferencia que recibió por los mítines electorales y que ahora el partido le afea.
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Cascos, que respondió a todas las preguntas, se reafirmó en el uso del local alquilado en Madrid como sede del partido, pese a que la actual dirección de Foro lo niega, restando importancia a que la arrendataria fuera una sociedad vinculada a su exmujer. E incidió en que los gastos de representación están convenientemente fiscalizados, pese a que la nueva dirección entiende ahora que no responden a su actividad política. De este modo, según pudo saber este diario, comentó que Foro le pagaba la gasolina para viajar a su destino vacacional porque su entrega al partido era diaria y dijo que si se le abonó el coste de la reparación de su coche familiar –a nombre de su entonces mujer– fue porque en ocasiones, pese a que disponía de coche oficial y chófer, también lo utilizaba para sus responsabilidades políticas. Eso sí, según fuentes judiciales, atribuyó alguno de los gastos, como la compra de un videojuego y otras facturas familiares, a posibles errores.
«Emblema de la querella»
En una breve comparecencia ante los medios de comunicación, el exministro de Fomento aseguró que había presentado en el Juzgado «todos los documentos de prueba» y, como ejemplo, quiso exhibir la tasa original de la licencia de pesca que, según sus propias palabras, se ha convertido en el «emblema» de la querella. Insistió en que el tributo fue pagado personalmente por él «como he pagado toda mi vida todas las licencias de pesca», mientras que desde la acusación insisten en que, posteriormente, cargó el coste a las arcas del partido.
Previamente declaró durante más de dos horas Carmen Moriyón, quien ratificó la querella interpuesta por el partido, si bien el importe exacto que podría ser reclamado a Cascos como responsabilidad civil no se ha cuantificado aún, según indicó el abogado, Luis Llanes.
El lunes está previsto que declaren como testigos Enrique Lanza e Ignacio Iglesias, miembros de la Comisión Directiva de Foro durante la etapa que se investiga, así como Daniel Martínez Fernández, de Centium Auditores, entidad que suscribe la auditoría externa sobre la que se sustenta la querella. Se prevé que las partes soliciten nuevas pruebas tanto testificales como documentales.
Por otra parte, y en un proceso judicial paralelo pero vinculado a la crisis interna de Foro, ayer quedaban listos para sentencia los pleitos abiertos tras la impugnación por parte de Jorge Fernández y Daniel Armas de la Comisión Directiva en la que Carmen Moriyón les retiró la condición de miembros de este órgano ejecutivo del partido.