Real Oviedo - Levante: El cielo del Carlos Tartiere se volvió azul en una tarde feliz

El día empezó nublado, pero acabó soleado, con una tarde perfecta para disfrutar de un partido que además tuvo el premio añadido del triunfo de los ovetenses. Casi 21.000 espectadores en la grada vibraron con el Real Oviedo durante los 90 minutos y mostraron una comunión total, ya que apoyaron cuando se necesitaba en la segunda mitad, con el rival volcado en busca del empate.

El conjunto visitante tampoco estuvo solo en el Carlos Tartiere, ya que cerca de medio millar de aficionados del Levante se dieron cita en las gradas, pero no se les escuchó demasiado ante el ánimo constante por parte de los azules.

El grito final de liberación, al término del noveno minuto añadido por el árbitro, fue para celebrar más de tres puntos. Era el de la certeza de que el equipo va a pelear por el ascenso hasta el final de temporada y lo demostró ante un rival que aspira al ascenso directo.

En una tarde primaveral, los aficionados pudieron disfrutar en el descanso de una coreografía de baile que animó a los aficionados mientras saboreaban que estaban por delante en el marcador.

En las gradas del Carlos Tartiere se encontraba el exjugador ovetense Abel Bretones, que aprovechando el parón en Primera no se quiso perder el partido. Aprovechó para saludar a sus excompañeros en el conjunto ovetense y también tuvo tiempo para hacerlo con el que fuera su entrenador en el filial, Jaime Álvarez.

Cuando acabó el encuentro, tras la 'haka' habitual de los jugadores en el fondo Norte, en los videomarcadores se proyectó el tramo final del encuentro del Oviedo Femenino, que acabó con empate sin goles ante el Racing de Santander, lo que le hace no depender de él mismo en la última jornada.

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