Coronavirus | España pierde grandes compras de material sanitario

El Ministerio de Sanidad dejó escapar la semana pasada por inacción una gran compra de material sanitario procedente de China ofrecida por un empresario español. El pedido, compuesto por millones de mascarillas, centenares de miles de guantes de nitrilo, tests de diagnóstico y equipos de protección individual (EPI), estuvo en la mesa del ministerio desde el 11 de marzo y el empresario, tras nueve días de espera y múltiples gestiones que en su mayoría no recibieron respuesta, lo acabó colocando en otros dos mercados en los que existe mucha demanda, Miami y Australia.

En los últimos días, distribuidores que se dedican a la venta de productos entre China y España han comenzado a levantar la voz y a criticar al Gobierno por no estar sabiendo hacerse en el mercado internacional con material sanitario esencial mientras los profesionales continúan denunciando la falta de equipos.

Un empresario español que se declara «indignado» por la actitud del Ejecutivo y que mueve grandes cantidades de materiales desde China hacia otros países explica su caso: «El 11 de marzo me puse en contacto por primera vez con el Ministerio de Sanidad porque podía conseguir material muy variado y a buen precio. Ofrecí mascarillas, EPI, tests... Les dije que podían tener el material en 72 horas en Barajas. Pero no me contestaron», recuerda este distribuidor.

Pasaron los días y mientras aumentaba la alerta en la calle y los profesionales comenzaban a advertir de las carencias materiales, él iba recibiendo más ofertas porque la producción china, antes enfocada a su mercado nacional, se abrió al extranjero hace dos semanas, una vez que el país asiático superó el coronavirus. El lunes de la semana pasada, día 16, el empresario habló con un alto cargo ministerial, «una persona muy competente», aclara, y volvió a ofrecerle material. Desde el ministerio le enviaron hojas de oferta para que concretara el pedido. «Se las envié rellenadas. Había productos que ya estaban más caros, porque la demanda mundial se ha disparado, pero otros seguían teniendo unos precios buenísimos», asegura.

«El viernes, cuatro días después de presentarle esta oferta al ministerio, contacté otra vez con ellos. Después de que me pasaran de una persona a otra, finalmente hablé con alguien a quien le pude decir que esa remesa ya no podía esperar más, que empresas de Brasil me las querían comprar inmediatamente, y que la estaba aguantando porque eran para España, mi país, que no se nos podían escapar. Estaba tan seguro de que el ministerio las iba a comprar que hasta reservé un 'time slot' en un aeropuerto chino, cosa muy difícil en estos días. Pero nada, no hubo pedido. A la hora, las había vendido», recuerda. En aquella última conversación, el alto cargo con el que hablaba le dijo que el Ministerio de Sanidad tenía tantas ofertas sobre la mesa que las estaban estudiando todas. «Pero si tienen tantas ofertas, ¿por qué el material no está ya en España?», se pregunta este empresario, que una vez rechazado el pedido, se plantea no hacer más ofertas al Ministerio de Sanidad y hablar solo con comunidades autónomas. «Me duele muchísimo, pero tengo la sensación de estar haciendo el ridículo».

Muy categórico, este distribuidor cree que España «no está comprando material porque no está pagando». En estas operaciones, explica, el 30% se paga por adelantado y el 70%, cuando el material ya está en el avión. Eso así, avisa de que Sanidad tiene que darse prisa «porque otros países se están moviendo con rapidez».