Diego: «Esto es una pasada tras once años vistiendo la camiseta del Sporting»

No tenía palabras al finalizar el encuentro y en su cara se dibujaba una sonrisa, pero de su boca no podían salir las palabras exactas para describir lo que sintió. «Es una pasada, no lo puedo explicar, lo de El Molinón ha sido increíble, una locura. Fue espectacular en los momentos finales, lo han dado todo ellos también y no tiene ningún sentido lo de esta afición», subrayaba Diego tras el encuentro.

El lateral se estrena como goleador y da a la victoria la importancia que merece «ante un equipo que lucha por ascender». Su gol llegó «después de trabajar toda la semana en los bloqueos y los centros durante los entrenamientos».

Bruno fue otro de los que se lleva un buen recuerdo del día de ayer. El canario no está teniendo muchos minutos y menos aún tras la llegada de José Marsà.

«Hemos ganado un partido, pero queda mucho por hacer, hay que seguir así. Seguro que ellos creían que iban a ganar en El Molinón y no ha sido así. Si ganas un partido puede ascender en la tabla, pero si lo pierdes te puedes ir abajo», explicó el defensa.

Para el central, que tenía casi su presencia asegurada al no estar disponibles ni Marsà, ni Izqueirdoz, ni Insua, lo de ayer fue un premio a la constancia. «A mi me pagan por entrenar y por aprovechar los momentos que pueda tener, me voy muy contento y con ganas de más», destacó el canario.

El Molinón fue ayer un jugador más y durante los minutos finales jugó un papel crucial. Eran muchos los cambios en el once y Bruno quiso dedicarle la victoria a los que como él están teniendo pocos minutos. «Jeraldino, Jordan o Jordi Pola han demostrado su profesionalidad y es bueno que la gente hay podido aplaudirlos», advirtió Bruno.

Para el defensa estos meses han sido «muy duros». El canario veía como el equipo no funcionaba y sabía que no iba a jugar. «Todo ha sido muy raro desde que llegué, jugué lesionado, hubo una destitución de un entrenador y ahora me tocó jugar y aquí todos tiramos para adelante, es lo que tenemos que hacer», aseguró.

El Sporting despidió el encuentro de ayer con casi un hermanamiento total sobre el césped. Jugadores, técnicos y otros trabajadores se unieron en una piña final y se felicitaron por haber logrado una victoria que les acerca al objetivo de la permanencia.