Iñaki Churruca | Exjugador del Sporting

«Hay quien piensa que tirar por los de casa es ingenuo, pero ese es el camino»

–¿Qué supone para usted este reconocimiento?

–Fue una sorpresa y a la vez una satisfacción. Que se acuerden de uno en un evento de este tipo, poniéndole el nombre a un trofeo y viniendo de una asociación de peñas, me ha gustado mucho. Tengo que estar agradecido.

–¿Esperaba un reconocimiento así después de tantos años?

–No. Salvo los futbolistas muy especiales, como Messi, no te lo esperas. Nosotros jugábamos porque nos gustaba y era nuestra profesión, pero es un premio al trabajo bien hecho.

–Lo que demuestra este premio es que la afición no se ha olvidado de usted.

–He notado el cariño de la afición desde que llegué con 18 años a Gijón para hacer una prueba con el Sporting. Ya de aquella vi que había un reconocimiento a los jugadores diferente, el sportinguismo se vivía de una forma que no conocía. Ahora con la juventud es diferente, pero sí que todavía hay gente que nos vio jugar y solo tienes que ir por las peñas para ver ese afecto que te demuestran.

–El primer galardón con su nombre va a ser para Marcelino García Toral. ¿Cómo le definiría?

–Su trayectoria le define. Ha entrenado muy buenos equipos, en España y el extranjero. Su carrera habla por él.

–Entre esos equipos estuvo su Athletic de Bilbao.

–Creo que allí estuvo a gusto y que hizo una labor importante. En todos los clubes en los que ha estado hizo un trabajo importante.

–También entrenó al Sporting.

–Los entrenadores de casa, Marcelino en ese momento, hicieron una gran labor. Es importante entender la casa. El análisis que puedes hacer del aficionado, de la cantera, es fundamental para el éxito. Y en Villarreal han hecho un buen trabajo de base. El fútbol ha cambiado mucho y hay gente que piensa que hablar del romanticismo de tirar por los de casa es ingenuo, pero creo que hay que seguir por ese camino.

–El Sporting va a comenzar su octava temporada en Segunda. ¿Qué le está faltando para dar el salto?

–Un poco de consistencia para hacer un equipo competitivo, que piense de otra forma. Es un club histórico que estuvo muchos años en Primera, con solera, y los adversarios siempre han tenido cierto temor al equipo. Hay que ser un equipo que muestre que quiere ascender, ser un poco más agresivo en el sentido de ir a por el partido desde el principio y que el sportinguismo se emocione. Y que haya oportunidades de gol, porque últimamente veo que no hay tantas. Cuanto más cerca de la portería contraria, mejor.

–¿Cómo ha visto al equipo la pasada temporada?

–Irregular, le faltó algo de personalidad. Empezó bien, pero se quedó en la mediocridad de todos los equipos. Hay que ver al Espanyol, al Elche, al Levante... y nos les he visto diferentes al Sporting. No practicaron un fútbol suelto, con personalidad. Ha habido mucho conformismo con los empates. Hasta el puesto 12 podían entrar en el 'play off', pero no se ha visto un equipo dominador, aunque sea en casa.

–¿Tenía ilusión por el ascenso?

–Al principio no me daba demasiada garantía, pero empezó bien. Luego, la irregularidad te genera dudas. No obstante, se llegó al 'play off'. Tenía la ilusión de que podía ser, pero también la duda. Ha sido una temporada barata para ascender, tengo la sensación de que hemos perdido una oportunidad. Ahora hay que buscar otra.

–Quien parece que no falla nunca es la afición.

–Siempre cuento con la afición del Sporting, aunque no son tan críticos como cuando jugábamos nosotros. Hay que exigir, de vez en cuando los profesionales necesitan la crítica. Eso sí, sin insultos. Una buena silbada en un momento determinado espabila a los futbolistas.

–El Molinón pitó a Joaquín.

–Y a Quini, y era pichichi. La afición tiene su importancia, también para criticar. Es decir 'vamos a intentarlo'.

–Empieza un nuevo proyecto con Rubén Albés. ¿Qué espera de este equipo?

–No lo conozco como entrenador. Creo que hay que hacer un equipo compacto y con base, ha habido demasiados cambios durante esta temporada. Cambiar cuatro o cinco de golpe da cierto desasosiego al jugador. El futbolista también debe tener su premio y la confianza del entrenador. Un equipo con ocho jugadores básicos, con sus descansos, es importantísimo, da seguridad.

–¿Hay que tirar más de la cantera?

–La verdad es que es algo que echo de menos. A veces, el tema de la cantera son ciclos, pero hay que trabajarla y dar oportunidades a los jóvenes. Están sacando chicos con 16 años y es cuestión de buscar talentos y hacer un trabajo, aunque sin hacer figuras antes de tiempo, que no sea barato estar en el primer equipo.