Reacción insuficiente para el 'play off'

Rubén Albés admitió el sábado, tras empatar ante el Almería en El Molinón, que «estamos pagando la cagada del mes de diciembre». El error al que hizo referencia el preparador son, en realidad, dos meses; diciembre y enero.

Es el tiempo que necesitó el Sporting para volver a ganar. Dos meses exactos con un parón de dos semanas debido a las vacaciones navideñas. Siete partido entre una victoria y otra. Números que, como es lógico, han alejado a los rojiblancos de los puestos de privilegio.

Del 1 de diciembre al 1 de febrero, el Sporting fue perdiendo fuelle en la competición hasta el punto de quedarse instalado en la zona media de la clasificación. Lugar del que intenta salir para recuperar el tiempo perdido, pero que le está resultando imposible ante la falta, nuevamente, de victorias. Los empates no son suficientes cuando los rivales siguen sumando y de tres en tres.

Los errores defensivos y la falta de eficacia goleadora son dos losas que impiden al Sporting hacer soñar a sus aficionados. Una prueba clara de ellos fue el choque del pasado fin de semana. Los hombres de Albés completaron una gran primera parte, pero se fueron al descanso por debajo en el marcador.

Ya en la segunda mitad igualaron el encuentro, pero volvieron a desaprovechar una superioridad numérica sobre el terreno de juego tal y como sucedió ante el Eibar. Si el Sporting consigue los tres puntos el próximo sábado ante el Zaragoza, habrá pasado un mes exacto desde el último triunfo en Liga. Un periodo demasiado largo para un equipo que quiere ser aspirante y que ha visto como el empuje del Eldense le ha dejado solo siete puntos por encima del descenso.

A los errores individuales y a la escasa puntería de las referencias ofensivas hay que añadir también el número de lesionados del primer equipo.

La enfermería rojiblanca no se ha vaciado en ningún momento esta temporada. Albés no ha podido contar con la totalidad de sus futbolistas y eso es un gran hándicap para un entrenador al que ya le confeccionaron una plantilla corta en efectivos.

Otero, Gaspar Campos, Queipo, Campuzano, Caicedo, Róber Pier, Curbello, Bernal y Maras son algunos de los futbolistas que en algún momento de la presente temporada no han podido participar en la Liga por dolencias musculares. Un mal que se sigue repitiendo.

El único punto positivo de los últimos meses de competición es que el Sporting suma cuatro jornadas sin conocer la derrota. Los rojiblancos doblegaron al Burgos el pasado 1 de febrero. Desde entonces no han hincado la rodilla.

Tres empates consecutivos hacen que los hombres de Albés vean un hilo de esperanza en que se puede alcanzar los puestos que dan acceso al 'play off'. El único inconveniente es que dos de esos tres empates se lograron en El Molinón.

Si algo resulta evidente, y más en Segunda División, es que para aguantar el ritmo de los mejores equipos de la categoría hay que dejar escapar muy pocos puntos en casa. Y El Molinón no ha sido el fortín de otras temporadas.

La necesidad hace que los rojiblancos tengan que ir a Zaragoza a sumar los tres puntos. No queda otra si no quieren que los seguidores más optimistas y creyentes terminen definitivamente del bajarse del barco.

Catorce son los partidos que quedan por disputarse. Un total de 42 puntos en juego de los que el Sporting necesita lograr en torno a treinta para estar en la pelea por los puestos de 'play off'. Una cantidad que parece una utopía, pero que el propio entrenador reconoció tras el empate ante el Almería que obligará a realizar un gran último tercio de temporada.