Rubén Yáñez, portero del Sporting de Gijón: «Después de la salvación, si hay que hablar de renovación, hablaremos»
«Hay que tener tranquilidad, dejar a la gente trabajar, con la esperanza y mentalidad de que el año que viene se tiene que hacer un mejor trabajo que este», dice Rubén Yáñez
Rubén Yáñez (Lloret de Mar, Gerona, 1993) se apoya con cara de pocos amigos en una barandilla que rodea un añejo pasillo, que 'pica' ... para arriba, de La Rosaleda. La zona en la que se encuentra, por donde salen jugadores, técnicos, árbitros y, en general, todos los actores del encuentro, conecta los vestuarios con el aparcamiento interior del estadio andaluz. El palo del sábado, reconoce durante su entrevista con EL COMERCIO, el único medio asturiano desplazado hasta Málaga, fue duro. Una derrota que enterró sesenta minutos de partido prometedores y que dejó la permanencia matemática, para disgusto de todos, a la desgracia del Eldense durante su visita de ayer al Castellón. Un resumen, completa un Yáñez autocrítico, de lo que está siendo la temporada 2024-2025 del Sporting de Gijón, a la que solo le quedan dos capítulos por emitir. El primero, la visita del Cartagena, el fin de semana, a Gijón.
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«Es el reflejo de lo que se ha venido viendo durante todo el año», lamenta sobre los porqués de la derrota en La Rosaleda el guardameta catalán, altamente fiable de nuevo en Málaga, a donde regresó el sábado tras su salida de hace dos veranos, impotente frente al doblete del local Chupe. En el momento en el que Rubén Yáñez concede esta entrevista, todavía no se ha jugado el Castellón-Eldense, clave para sellar la permanencia matemática de los rojiblancos con ese empate final.
–¿Qué pasó para que terminasen perdiendo un partido que parecían tener controlado? Incluso se habían adelantado en el marcador con el gol de Otero.
–Pues que acabamos fastidiados. Nos pusimos por delante en el marcador, jugando fuera... Teníamos que haber amarrado el resultado como fuera, pero tuvimos puntos débiles. El vestuario está jodido porque era un día perfecto para conseguir el objetivo que nos quedaba. Ahora, nada, a esperar a ver cómo termina la jornada y, con independencia de eso, a competir el siguiente partido y a ganarlo.
–El equipo ha sido poco contundente en el tramo final del partido, ¿no?
–En dos acciones que fuimos un poco débiles, ellos marcaron la diferencia en el partido y eso fue lo que nos dio un resultado negativo.
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–¿Cree que el guion de este partido es un resumen de la temporada del Sporting?
–Sí, total. Creo que es el reflejo de lo que se ha venido viendo durante toda la temporada. Son cosas que tenemos que corregir y ya también de cara a la temporada que viene. Pero, bueno, ahora este partido ya ha pasado y tenemos que pensar en la siguiente jornada, en la visita del Cartagena a El Molinón. Esperar los resultados y a seguir trabajando. No nos queda otra. Quedan dos partidos y hay que seguir hasta el final.
–El entrenador, Garitano, no quería ni oír hablar de que el Castellón hiciera un 'favor' al Sporting ganando este domingo al Eldense...
–Exactamente. Dependemos de nosotros y esta jornada dependíamos de nosotros. No pudimos cerrarlo y vamos a por el siguiente partido. Con una victoria ya lo tenemos. Debemos pensar en nosotros y, luego, los resultados que se den en los demás partidos, pues que se den. Tenemos que mirarnos a nosotros, porque seguimos dependiendo de nosotros para cerrar esto, y ya está. No hay más que pensar.
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–¿Cree que esta temporada ha sido un toque de atención para el Sporting?
–Sí. Tenemos que tener una mentalidad diferente de cara a la temporada que viene, aspirar a otras cosas. Entiendo que el Sporting es un club que siempre debe aspirar a estar arriba en la clasificación, aunque este sea un objetivo muy querido por todos los equipos de la categoría. No es nada fácil, pero lo que está claro es que hay que hacer mejor año que este.
–Tiene otro año más de contrato con el Sporting, hasta 2026, y el club tiene intención de plantearle una ampliación cuando concluya la temporada. ¿Ya han podido hablar?
–Me queda todavía contrato. Las dos partes estamos a disposición para hablar y ya se verá. Lo que quiero es cerrar esta temporada antes que nada y, sobre todo, cumplir el objetivo. Y una vez que se logre, si hay que hablar de renovaciones, hablaremos.
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–¿Y usted cómo ve su futuro en el Sporting? Se anuncia un verano con muchos cambios.
–Hay mucha gente cedida y muchos compañeros que acaban contrato. Es el club el que tiene que ponerse a trabajar en esto. Creo que hay que tener tranquilidad, dejar a la gente trabajar, con la esperanza y mentalidad de que el año que viene se tiene que hacer un mejor trabajo que esta temporada. Hay que seguir aspirando a estar en lo más alto, como el año pasado. Pero ahora mismo tenemos que tener la mentalidad de, primero, cerrar este año la permanencia. A partir de ahí, ya se verá.
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