«Hay un cierre encubierto», dicen los sindicatos tras 40 supresiones más

Nueva jornada de cancelaciones en los cercanías de ancho métrico. Renfe suprimió otros 40 servicios programados en la división que ahora acoge a la extinta Feve. Fuentes del sector estiman en 150 las frecuencias anunciadas y no prestadas durante la última semana, un número importante, aunque todavía no masivo si se tiene en cuenta que la cartelera se compone de unos 2.100 horarios a la semana. «Hay un cierre encubierto del ancho métrico, nos están matando en silencio», clamaban los sindicatos ferroviarios.

La empresa sostiene que las anulaciones responden a la falta de maquinistas disponibles, y que los recortes se están dirigiendo a las líneas y horarios de menos demanda. De momento la empresa no aclara cuándo podrá cubrir la falta de efectivos. El operador tiene abierto un proceso de selección para fichar a 340 conductores; hay 475 aspirantes admitidos y todos están citados para someterse a los exámenes el 17 de julio. Su incorporación a las plazas que ganen parece improbable antes de otoño.

«Nos espera un verano de pesadilla, de infierno; es increíble que la empresa lance un plan de bajas sin tener previsto esto», indica Juan Carlos Lora, del sector ferroviario de CC OO. Su compañero de UGT Luis Blanco Junquera confirma la impresión: «Hay becarios en prácticas e interinos, pero esto ahora no tiene solución a corto plazo, ya es tarde».

Los sindicatos están haciendo recuento de efectivos, al constatar que se están recortando servicios «mientras hay maquinistas de otras bases que podrían cubrir ese hueco, pero no se le llama para evitarse el coste». Por otra parte las bajas en los talleres «provocan que parte del material móvil no se pueda usar; cuando no falta el maquinista es el propio tren el que no se presenta», indica Lora.

El malestar tomó ayer forma de moción aprobada por unanimidad por el Ayuntamiento de Carreño. La iniciativa exige dotar a los apeaderos de sistemas que notifiquen las incidencias, reclama un calendario de actuaciones para resolver las deficiencias y pide al Principado que vigile el cumplimiento de las obligaciones de servicio público.