Rebolleres Rock recurre a los micromecenazgos para financiar el festival

La Asociación Ensame Xuvenil Trisquel, entidad organizadora del Festival Rebolleres Rock, recurre al sitio web Verkami, en el apartado de iniciativas 'crowdfunding', para financiar el evento. Esta plataforma destinada a impulsar proyectos artísticos y culturales colectivos y personales, basada en la complicidad del público que ejerce un mecenazgo mediante aportaciones económicas.

Es el último intento para asegurarse la celebración del certamen musical ante el retraso de la concesión de una ayuda municipal de 20.000 euros. Una subvención que, en anteriores ediciones, se venían otorgando de forma directa y que este año, por razones legales, debe estar sujeta a una serie de trámites administrativos.

Y es que el festival precisa de una larga gestión que, hasta ahora, comenzaba a primeros de año con la contratación de los grupos musicales. Ahora, ante las demoras en la concesión de la ayuda, los organizadores se ven obligados a buscar la financiación por otros medios. En el sitio web, Trisquel detalla los gastos que requiere la puesta en marcha del festival. De todos ellos, la contratación de los grupos musicales es el de mayor cuantía, 12.000 euros. Sigue la compra de productos que se pondrán a la venta en la carpa (5.500 euros), equipos de luz y sonido (2.500 euros), carpas, vallas y camerinos (1.200 euros), carteles y publicidad (455 euros), camisetas (500 euros) y comidas y alojamientos en hoteles (850 euros).

La previsión de la organización es que no podrá salir todo el dinero de Verkami, pero calcula que, al menos, la recaudación por este medio sufrague los gastos de publicidad, camisetas y comidas y alojamientos, que asciende a mil euros. Y así fue. Al cierre de esta edición, se habían conseguido 1.030 euros. Una vez cubiertos los mil euros, lo que se consiga se destinará a otros gastos del festival.

Actividades solidarias

Trisquel también subraya el interés en mantener la misma programación de ediciones anteriores. La más importante es la jornada solidaria en colaboración con Cruz Roja destinada a la recaudación de alimentos para ayudar a las familias necesitadas que el pasado año ya superó los mil kilos.

Otra acción solidaria es la exposición fotográfica que lleva por título 'Desierto de esperanza', sobre el pueblo saharaui, las charlas sobre temas de actualidad y la organización de juegos infantiles el mismo día del festival, para acercar la música en directo a los más pequeños. Todo ello con el objetivo de lograr un mayor contenido al evento musical que tiene como escenario la pradera de San Antonio. En 2015, el festival se celebró el 25 de julio, con las actuaciones de Gatillazo, Habeas Corpus, Skama La Rede, Los Pinflois y Rock'n'Guah.es, entre otros grupos.