«Oviedo tiene pocos bomberos», reconoce el concejal de Seguridad
El edil pide prudencia antes de valorar lo sucedido, cierra filas con el servicio y pide «no dudar de su profesionalidad»
G. D. -R./M. I.
Domingo, 10 de abril 2016, 01:55
El concejal de Seguridad Ciudadana, Ricardo Fernández volvió ayer a pedir prudencia a la hora de valorar o interpretar lo sucedido el jueves en el incendio de Uría, 58. Recordó que la Policía Nacional ha abierto una investigación sobre el suceso, en el curso de la cual ya han prestado declaración tres mandos de Bomberos, el jefe del servicio y dos cabos, y en la que «es previsible que haya muchas más declaraciones de funcionarios que han intervenido en las labores de extinción del incendio». La Brigada Judicial ha recabado materiales, efectos -entre ellos la ropa de trabajo del bombero herido en el suceso, Juan Carlos Fernández Granda, 'Cuni', de 35 años de edad- y decenas de vídeos e imágenes de lo sucedido para su investigación.
El edil negó expresamente haber recibido quejas sobre la falta de mantenimiento de las bocas de incendio, pero sí «sobre la falta de personal. Oviedo tiene muy pocos bomberos, estoy cansado de decirlo desde el primer día», recalcó. Pocos, pero que cuentan con su apoyo total. El edil cerró filas con el servicio. «No quiero que se ponga en duda la profesionalidad de ninguno», porque «lo han dado todo».
Sin referirse a los posibles fallos en la dirección del dispositivo, denunciadas por algunos de los funcionarios, Fernández rechazó «apuntar a algo que pueda poner en duda la dignidad y profesionalidad de un colectivo de trabajadores y su sacrificio». Son cuestiones aún sin respuesta. ¿Quién dirigía y desde dónde el dispositivo?, ¿quién ordenó (si lo hizo alguien) a los bomberos entrar en el edificio cuando este amenazaba ruina, pese a que no había víctimas en el interior? o la misma cuestión, pero referida a las causas que llevaron al bombero herido y su compañero fallecido a abandonar la cesta y caminar sobre la cornisa, que se desplomaría arrastrándolos al interior del edificio. También hay dudas sobre si se produjo el número preciso de relevos. Juan Carlos Fernández, el funcionario herido, llevaba en el suceso desde el primer minuto, al menos cuatro horas y media, la mayor parte trabajando desde el brazo articulado.
Fernández volvió a mostrarse prudente y explicó que él también está recopilando toda la información para verificar qué es lo que sucedió exactamente. También, investigando si la calle Uría tiene un suficiente número de hidrantes y si presentan alguna deficiencia. Cuestiones todas sin respuesta. Tampoco hay partes de la intervención, aún.