La Fiscalía investiga el caso de la niña fallecida en Gijón tras un supuesto acoso
El ministerio público atiende la denuncia contra cuatro compañeras de la joven y la dirección del colegio Santo Ángel interpuesta por la madre de la víctima
IDOYA REY , AGENCIAS
Jueves, 25 de abril 2013, 04:13
Desde que el pasado 11 de abril, una menor gijonesa de 14 años fuera rescatada sin vida en aguas del Cantábrico, frente al acantilado de La Providencia, su familia no ha parado recibir llamadas cuanto menos preocupantes. Llaman a su madre para contarle que la adolescente estaba sometida, supuestamente, «a un acoso diario por parte de otros compañeros» de su colegio, el Santo Ángel de la Guarda. Por ello, la familia de la fallecida ha decidido presentar dos denuncias y así esclarecer los hechos que precedieron la muerte de la menor. Una, ante la Fiscalía de Menores, contra cuatro de sus compañeras por ese presunto acoso; y otra, en el Juzgado de Instrucción número 3 de Gijón, que amplía la acusación contra la dirección del centro escolar. Denuncias que la fiscalía ya investiga, según han confirmado fuentes judiciales.
La versión que sostiene la abogada de la familia, Margarita Montes, pasa por que ese «hostigamiento» indujo a la joven a quitarse la vida. De hecho, solicita que se inicie el correspondiente proceso penal por la posible comisión de los delitos de «inducción al suicidio, lesiones, amenazas, coacciones y tortura y delitos contra la integridad moral».
Basa su argumentación en los testimonios de muchos compañeros y también en diversas publicaciones realizadas en redes sociales antes y después de la muerte. «Se acompañan como prueba diversas conversaciones en las que a una de las menores denunciadas se la llama asesina por otros niños, reconociendo ella públicamente que había insultado y pegado a la fallecida, pero que todo el Santo Ángel hacía lo mismo», relata la denuncia a la que ha tenido acceso EL COMERCIO.
Además, su madre sabía que la niña «tenía problemas con en el colegio» y ya había solicitado consulta con una psicóloga de un centro de salud, aunque no se imaginaba, según relata la denuncia, que esas dificultades fueran «de la entidad que se está conociendo y que tan trágicas consecuencias ha tenido». Fue el pasado mes de septiembre cuando recibió las primeras noticias sobre las dificultades que estaba pasando la menor en el colegio Santo Ángel de la Guarda.
Los antecedentes
Un día de septiembre, narra la denuncia, la madre de una compañera de la niña llamó por teléfono a la denunciante al mediodía. Quería interesarse por la menor, pues había tenido un incidente durante el horario lectivo. «Se había hecho unos cortes en los brazos», explica el texto. Al día siguiente, la madre de la niña acudió al centro para pedir explicaciones, pues «nadie le había informado de lo sucedido». Se llegó al acuerdo entonces de que si la menor no asistía a la primera hora de clase darían inmediato aviso a su progenitora.
A partir de ese día, la denunciante tuvo otras entrevistas con la psicóloga del colegio y con la tutora. «La chica había tenido tres faltas que no habían sido comunicadas por el colegio», asegura la denuncia.
Ya en febrero, la progenitora informó a la tutora de la niña de que se había enterado de un episodio violento con su hija como protagonista. La niña había tenido, supuestamente, que encerrarse en un baño del colegio con una amiga para protegerse de otros compañeros. Siempre según la versión de la denunciante, la profesora informó «de que el centro tiene conocimiento, restándole importancia, e indicándole que la psicóloga iba a obtener información» sobre lo ocurrido.
Asimismo, también incluye la denuncia un supuesto incidente con un profesor del centro que habría «insultado en medio de clase a la niña. Hay testigos de dicho hecho». «Al parecer es notoriamente conocido el acoso al que era sometida la niña. Tanto acoso psicológico como agresiones físicas», subraya el texto.
El día del fallecimiento
El pasado 11 de abril, la menor no acudió al centro escolar, «sin que hubiera sido informada la familia». Ya sobre las tres de la tarde, la denunciante se enteró de la ausencia a clase de su hija por otra alumna del centro. Familia, amigos, a través de las redes sociales, las policías Nacional y Local y Salvamento iniciaron un dispositivo de búsqueda por la ciudad y la costa gijonesa.
Primero se localizaron unos libros tirados por el suelo y pasadas las cinco de la tarde el helicóptero de Salvamento Marítimo Helimer avistó el cuerpo sin vida en el mar frente a La Providencia. La Policía Nacional inició una investigación por los hechos, aunque descartó, inicialmente, la intervención de terceras personas. Parece ser que dejó varias cartas escritas. «A raíz de tan trágico suceso, han sido numerosas las compañeras y amigas de la niña que se han intentado poner en contacto con la familia, a fin de informar del acoso al que diariamente estaba sometida por parte de otras compañeras», relata la denuncia.
La letrada de la denunciante ha facilitado al Servicio de Atención de la Familia (S.A.F.) los datos de los testigos «del hostigamiento al que era sometida diariamente, si bien nos consta que son muchos más y se irán facilitando una vez se conozcan más datos».
Objetos desaparecidos
La denuncia incluye también la desaparición de varios objetos personales de la menor. La familia ha echado en falta un teléfono móvil, una cámara digital y un reproductor de música. «Es posible que su desaparición tenga relación con lo ocurrido».
El día anterior a la muerte, la menor le dio la contraseña de su teléfono a una amiga, «indicándole que en él estaba todo explicado y lo iba a necesitar al día siguiente, por lo que entendemos relevante para el esclarecimiento de los hechos que dicho dispositivo se localice».
La denuncia solicita que se abran diligencias por los hechos relatados y que se realicen varias pruebas comenzando por el interrogatorio de las personas denunciadas. También solicita la denunciante que se tome declaración a los testigos aportados y que se requiera al Colegio Santo Ángel de la Guarda para que remita copias de las reuniones celebradas entre el centro y la familia de la menor; de todos los partes o incidencias con la niña; del listado de alumnos de varios cursos; del número de profesores que se encontraban en el centro el día del suceso; y de las faltas de asistencia producidas el días de autos.