Los accidentes en la senda reducen un 17,5% las visitas a la Casa del Oso

Las visitas realizadas a la Casa del Oso, en Proaza, descendieron un 17,5% el pasado verano, según los datos registrados tras un inicio de temporada que estuvo marcado por los dos accidentes -uno de ellos, mortal- sufridos por dos excursionistas mientras realizaban la ruta en la Senda del Oso a finales de mayo. Sendos sucesos pusieron el foco en el mal estado de conservación y señalización de esta ruta turística.

El grueso de esta bajada se concentró en agosto, con 2.472 visitantes en total, pero 957 menos que el mismo mes de 2018, cuando se llegó a 3.429. La Casa del Oso, donde se ubica también la oficina de turismo de Proaza, recibió entre julio y septiembre a 5.225 visitantes. Fueron 1.110 personas menos que en el mismo período del año anterior.

En cuanto a la procedencia de los visitantes, según los datos aportados por la Fundación Oso de Asturias, el número de asturianos que se acercaron en julio hasta la Casa del Oso retrocedió un 50% respecto al mismo período de 2018. En agosto, ese descenso fue del 4%.

En el marco de las diligencias preprocesales requeridas por la Fiscalía del Principado tras los dos accidentes que se produjeron en mayo, la Guardia Civil detectó 201 deficiencias en distintos tramos de la Senda del Oso.

Ese informe registra fallos de conservación y seguridad especialmente en las zonas de Teverga -vallas, puentes y firme- y Santo Adriano y Proaza (barandillas en terreno llano y en zonas de talud con caída). Aunque en Quirós la ruta presentaba un estado general bueno, también registraba algunas deficiencias.