Lo que se ahorrarán los jóvenes con menos ingresos en Asturias con las nuevas deducciones fiscales
El Principado renovará un año más la rebaja de tasas aprobada en 2022 para auxiliar a ganaderos, pescadores, camioneros y empresas de autobús
El borrador de presupuesto autonómico de 2025 viene con una medida estrella en deducciones, un alivio para los asturianos que están entre los 16 ... y los 35 años e ingresan menos de 28.000 euros anuales. Si se cumplen ambas condiciones podrán acceder a una deducción «por los gastos vitales en los que incurran». El objetivo es «fijar población y favorecer que los jóvenes asturianos puedan independizarse». El importe máximo de la deducción es de 2.000 euros caso de contribuyentes de entre 16 y 25 años, 1.500 entre los 26 y los 30 años y 1.000 si el beneficiario tiene de 31 a 35 años.
Los gastos deducibles son los de la vivienda y sus suministros, educación, transporte y tecnología, pero también los deportivos y culturales, previa acreditación documental de dichos gastos, especifica el anteproyecto legislativo.
El expediente normativo del presupuesto estima que la medida supondrá «una merma de recaudación de 4,5 millones», lo que lo sitúa entre las novedades más potentes de lo que el Gobierno asturiano da en llamar la «vía fiscal asturiana». Con todo, dos datos. En Asturias hay 116.403 residentes entre los 16 y los 35 años; según el impacto económico estimado como máximo la medida llegaría a 4.500 de ellos, esto es, al 3,8%. Quienes ganan menos de 22.000 euros están exentos de la obligación de hacer la declaración de la renta, pero deberán tramitarla si quieren acceder a la deducción.
De entre las siete novedades en materia de deducciones que trae el proyecto presupuestario de 2025 destaca por su impacto económico la mejora en la que se aplica por cuidado de descendientes o adoptados de hasta 25 años. La cuantía por el primer hijo mejora desde los 300 euros hasta los 500. La deducción por el segundo se mantiene en los 600 euros. Según las estimaciones de Hacienda, esta medida tendrá unos 55.000 beneficiarios, «incrementándose el coste en 8,3 millones anuales».
La tercera deducción que más esfuerzo económico requerirá al Principado es la de compra de coches eléctricos. Se estima en 2,6 millones el dinero que no entrará en las arcas autonómicas por ella.
Algo menos es la privación de ingresos a la que se somete la Administración autonómica para animar a los dueños de viviendas a ponerlas en alquiler. Esta nueva deducción les permite deducirse los gastos «de conservación y reparación, la formalización del contrato de arrendamiento, las primas por seguros de daños e impagos, y la obtención de certificados de eficiencia energética» con un límite de 500 euros anuales y siempre que el piso lo pongan «a precios con sostenibilidad social». Estos beneficios fiscales mermarán la recaudación en otros 2,5 millones. La definición de qué es un precio sostenible está por concretar.
Cerca de la mitad supone el sacrificio que asume el Principado para mejorar la actual deducción por arrendamiento de vivienda habitual. El límite de renta para acceder a esta opción se eleva de 26.000 euros en tributación individual a 35.000, mientras en la conjunta salta de los 37.000 a 45.000. Eso ampliará el cómputo de beneficiarios, mientras que otros cambios mejorarán la cuantía de la deducción. En total la consejería estima que los cambios le restarán otros 1,3 millones.
Hay también mejoras en la deducción a quien compra o rehabilita su vivienda habitual, siempre que gane menos de 35.000 euros en tributación individual o 45.000 en la conjunta. El cambio en este beneficio fiscal resta otros 500.000 euros de recaudación.
Misma renuncia hará el erario para ayudar a la compra de acciones en nuevas empresas o de reciente creación. Aquí la condición es que la inversión se haga en una pyme o micropyme asturiana, siendo el límite deducible de 6.000 euros. Se estima otra pérdida de 100.000 euros por la nueva deducción para descendientes de fallecido por accidente laboral.
71 millones en deducciones
En total la Consejería de Hacienda estima que estas novedades mermarán la recaudación en 17 millones. Esa renuncia eleva a 71 millones «el coste conjunto de todas las deducciones vigentes» en el IRPF. En la última declaración había 22 deducciones autonómicas para aliviar los gastos en material de estudio, transporte, inversión en vivienda protegida o acogimiento de mayores de 65 años, entre otros casos. Los presupuestos de este año incorporaron ocho de ellas.
En el expediente normativo del presupuesto se dice que los contribuyentes podrán acogerse a las nuevas deducciones del presupuesto de 2025 en la declaración de que hagan a lo largo 2026, con lo que la merma de recursos al erario autonómico empezaría a notarse en 2027. Se trata sin embargo de un error, según aclara la Consejería de Hacienda. En el articulado de la ley irá una disposición para que las nuevas deducciones sean de aplicación ya en la declaración que los contribuyentes harán en 2025
Por otra parte hay también cambios en el impuesto sobre transmisiones patrimoniales y actos jurídicos. Se podrá aplicar el tipo reducido a la adquisición de un trastero y un máximo de dos garajes, además de viviendas compradas por familias monoparentales. Por esta vía el Principado estima que renunciará a otro millón.
El Gobierno asturiano prorrogará un año más la bonificación al 100% de tasas que aplicaba a determinados colectivos a los que consideró especialmente afectados por la subida de precios energéticos. La medida permite que determinados trámites de ganaderos, empresas agroalimentarias o la expedición de tarjetas de tacógrafo salgan gratis, por poner algunos ejemplos. En total son 3,2 millones más que dejarán de entrar en el erario.
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