Barbón insta a huir de «los egos que dan remedios infalibles y simples a problemas complejos»

A todos ellos, el jefe del Ejecutivo autonómico les envió un mensaje: el de la importancia para el futuro de Asturias de contar con su experiencia, con su talento. «Aquí no sobra nadie». Y, remarcó, «a nosotros nos corresponde propiciar el ecosistema más favorable para ello». En ese sentido, Barbón garantizó, ante el candidato del Partido Popular a la presidencia del Principado y fundador de Compromiso Asturias XXI, Diego Canga, que estaba entre el público, que la atención a la emigración se convertirá en una de las «paredes maestras de nuestra política demográfica en los próximos años».

«Es más que una promesa y una convicción, es imprescindible». Aunque, eso sí, también planteó que esta labor no está solo en manos de los políticos y administraciones. Todos, la sociedad civil, tiene que implicarse para, por ejemplo, tener confianza en las posibilidades de Asturias y «enviar al destierro los tópicos sobre la decadencia, las malas comunicaciones o la escasez de capacidad emprendedora». Así, defendió dirigiéndose directamente a los socios de Compromiso Asturias XXI, la oferta de vuelos internacionales que ofrece el aeropuerto de Asturias y la esperada llegada de la alta velocidad al Principado, que dijo era «cuestión de meses».

«Hemos arrumbado el miedo al cambio del paradigma industrial para acuñar la ciencia, la innovación y el desarrollo tecnológico como los sellos de nuestra nueva realidad empresarial», incidió Barbón. De momento, indicó que las cuentas regionales del año que viene incluirán una partida para la creación de la Oficina del Retornado, concebida para facilitar el regreso a la región de quien así lo desee y . Ocho de cada diez jóvenes que viven fuera de Asturias indicaron ese deseo, en el 'Libro blanco de la emigración' presentado precisamente por Compromiso Asturias XXI recientemente.

También hizo alusión el presidente en su discurso de clausura de la asamblea de Compromiso Asturias XXI a uno de los problemas más acuciantes de la región: la despoblación. «Asturias va a bajar del millón de habitantes, es algo que se sabe», planteó como punto de partida, escudándose en que la sangría demográfica es un proceso que se inició allá por 1985 y que desde entonces ha sido «inevitable» el declive poblacional. Pero el presidente no quiso ahondar en pesimismos y defendió que luchar contra esta pérdida de población será otro de los ejes de sus políticas. Los Presupuestos para 2023, en la recta final de la tramitación parlamentaria, permitirán «desplegar el mayor esfuerzo económico realizado en la historia del Principado para afrontar el reto demográfico». «Hemos elevado el listón a niveles impensables hace solo unos años, sostuvo.

Y ahí fue cuando desgranó algunas de las medidas que tiene la intención de aplicar. Una, el aumento de las ayudas directas a la natalidad, que llegarán a los 2.200 euros en los concejos rurales en riesgo de despoblación. Otra, la implantación, por primera vez, de las ayudas Concilias: 1.500 euros para el cuidado de menores de cuatro años cuando no haya escuelas infantiles en el concejo de residencia o, de haberlas, no tengan plazas suficientes. Y otra más, la aplicación de un amplio catálogo de deducciones fiscales que benefician en especial al medio rural. Entre ellas, una de 300 euros para familias con hijos menores de 25 años y otra de 1.000 euros para jóvenes emancipados hasta los 35 años.

Pero, volvió a advertir Barbón, «estas medidas no bastarán por sí solas para superar el desafío demográfico». «Las buenas políticas demográficas solo dan resultado si son transversales y se sostienen a largo plazo, con independencia de los vaivenes electorales», apunto al tiempo que llamaba a huir del arbitrismo -quienes con la mejor de las voluntades y el «mayor de los egos proponen soluciones definitivas, remedios infalibles y simples para problemas complejos»- y del adanismo, «con su desprecio a todos los logros anteriores». La mezcla de ambos, alertó, es «una combinación de alto riesgo. Explosiva como la nitroglicerina».

Así las cosas, Barbón hizo de nuevo un llamamiento a Compromiso Asturias XXI para contar con su ayuda para sacar adelante sus propuestas como la Oficina del Retornado y con la de la sociedad civil en su conjunto. Antes, el presidente de Compromiso Asturias XXI, Eduardo Sánchez Morrondo, había pedido a los políticos que una vez alcancen responsabilidades de gobierno «se aparten de partidismos y trabajen en consenso».

El acto de ayer incluyó una mesa redonda sobre las buenas prácticas de las empresas asturianas, en la que participaron Manuel Reinerio Fernández (Capsa), Yolanda Fernández (Edp), Eugenia Suárez (moderadora), Vanesa Fernández (Diecolpet) y Sonia Rodríguez (Masymas)