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R. M.
gijón.
Miércoles, 13 de mayo 2020, 01:51
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El abastecimiento de agua a la zona central de Asturias se refuerza y aporta así nuevos argumentos para desterrar el proyecto del pantano de Caleao de la programación hidrológica.
El Consorcio de Aguas de Asturias (Cadasa) celebró ayer una junta de gobierno en la que se informó de las consecuencias de la compra de la piscifactoría del Alba, ubicada en las proximidades de la estación de tratamiento de agua potable (ETAP) de Rioseco, en el concejo de Sobrescobio. La instalación tenía otorgada una concesión de 1.000 litros por segundo desde el embalse de Rioseco. Al adquirir la piscifactoría Cadasa se asegura por tanto el aprovechamiento de una reserva de agua de unos 31,4 hectómetros cúbicos al año, siempre que la Confederación Hidrográfica del Cantábrico le autorice la operación.
Se trata de una garantía importante. El pasado año Cadasa suministró 52 hectómetros a la zona central, por lo que la adquisición de la piscifactoría le otorga un caudal que le bastaría para cubrir el 60% de esa demanda. Para completar el nuevo esquema el consorcio deberá ampliar la ETAP de Rioseco. El refuerzo al abastecimiento sigue al logrado al pactar con Arcelor compartir la canal del Narcea.
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