La Red de Casas de Acogida asturiana protegió a 441 víctimas de maltrato en 2022
«Es una vergüenza para todos como sociedad que 3.408 asturianas hayan necesitado de los Centros Asesores de la Mujer», afirmó el vicepresidente
Chelo Tuya
Gijón
Martes, 28 de febrero 2023, 10:25
La Red de Casas de Acogida del Principado se convirtió en el refugio el año pasado de 441 víctimas de la violencia machista. De ellas, 206 eran los menores a cargo de las víctimas. Otras cuatro, eran personas mayores, también dependientes de la víctima. Unos datos similares a los prepandémicos, cuando la red, que tiene a la gijonesa Casa Malva como buque insignia, se convirtió en la residencia de 446 víctimas. Muy diferentes son, sin embargo, los datos de los Centros Asesores de la Mujer (CAM), los dispositivos abiertos el Principado por la región y formados por una abogada y una psicóloga que atienden, de forma gratuita, a las mujeres que necesiten de su asesoramiento. En 2021, por los CAM pasaron 2.883 mujeres. El año pasado, 3.408. «Son 525 mujeres más. Es una vergüenza para todos como sociedad que 3.408 asturianas hayan necesitado ese recurso».
Así lo aseguró el vicepresidente del Principado y consejero de Administración Autonómica, Medio Ambiente y Cambio Climático, Juan Cofiño. Lo hacía él en el Pleno de la Junta General del Principado en respuesta a la portavoz de Izquierda Unida, Ángela Vallina, quien le trasladó su preocupación por los datos de violencia machista. «Hemos leído hoy en la prensa», en relación a lo publicado por EL COMERCIO, que «la violencia machista se dispara en Asturias un 50% y que hay un 38% más de asturianas con protección policial».
Noticia Relacionada
La violencia machista se dispara con un 50% más de asturianas en 'riesgo letal'
Para Vallina, «las cifras son terribles. En diciembre pasado asesinaron a 11 mujeres y a dos menores. En enero, a siete y a una menor. Si fueran víctimas de terrorismo, imagínese lo que se habría montado en el país, pero como son mujeres, parece que nos vamos acostumbrando». Una indiferencia ante la violencia machista que la portavoz de IU achacó, directamente, «con el negacionismo que practican algunos grupos políticos en su guerra con los valores de la igualdad y la democracia». En referencia a la ultraderecha, Ángela Vallina afirmó que «quieren a la mujer sumisa y sometida, una ideología intolerante e intolerable». Cuando intentaba cerrar su discurso con la petición de que «no se le haga el caldo gordo...», el presidente de la Junta, Marcelino Marcos Líndez, le recordó que se había acabado su turno de palabra.
«No se preocupe, cierro yo la frase», ofreció el vicepresidente del Principado, «este es un problema de todos. Los datos deberían movernos a la reflexión a todos, es una de las gravísimas preocupaciones que deberíamos tener», insistió Juan Cofiño. Mientras lanzaba el mensaje de que «es un problema que debemos combatir todos, aunque hay grupos políticos que están en la base social de que esto suceda», apuntaba hacia la única salida posible «apelar al sistema educativo». No obstante, también puso de manifiesto «todo el sistema desplegado por el Principado», en cuanto a prevención y protección, y señaló que «ese aumento de cifras de los CAM, según las expertas, corresponden a la violencia escondida, que está aflorando».