
Luis Antuña Montes, presidente del Colegio de Médicos de Asturias
«No todas las profesiones sanitarias son iguales, el actor protagonista es el médico»Secciones
Servicios
Destacamos
Luis Antuña Montes, presidente del Colegio de Médicos de Asturias
«No todas las profesiones sanitarias son iguales, el actor protagonista es el médico»Luis Antuña Montes (Gijón, 1969), director del área de Urgencias del HUCA, era ratificado el pasado miércoles como presidente del Colegio de Médicos de ... Asturias. Éste será su segundo mandato al frente de una institución que representa a 7.400 facultativos. Tras su proclamación oficial, charla con EL COMERCIO de la situación actual de la profesión.
–¿Por qué ha decidido optar de nuevo a la presidencia?
–Cuatro años entiendo que son pocos años cuando asumes una responsabilidad como ésta y te comprometes con unos proyectos que sobrepasan el período de un mandato y todavía no están totalmente cumplidos.
–No se ha presentado más candidatura que la suya. ¿Es por desgana o porque su junta directiva lo ha hecho bien?
–Esto no es sencillo. Conlleva un esfuerzo, tomar decisiones, dar la cara... y no es fácil encontrar a gente que asuma la responsabilidad de representar a colectivos. Además, a nadie le apetecía seguramente presentarse contra una junta directiva que había anunciado su intención de optar a las elecciones y que yo creo que lo hemos hecho bastante bien, la verdad.
–¿Sus propósitos para estos próximos cuatro años?
–Pues parecidos a los que teníamos cuando llegamos: colocar al Colegio en la toma de decisiones allí donde los médicos tengan algo que decir; mejorar el sentido de pertenencia de los colegiados a esta institución, que es su casa; velar por los principios y valores que guían la profesión médica... Y además de eso, vamos a continuar transformando la gestión del Colegio desde el punto de vista de la digitalización; tenemos ahora mismo en pleno desarrollo la obra de restauración tan importante que va a poner en condiciones nuestro edificio para los próximos veinte años; queremos facilitar la cooperación internacional desde la institución; haremos mucho hincapié en todos los temas de deontología médica...
–No es habitual ver al Colegio de Médicos movilizándose en la calle, pero sí lo han hecho contra la reforma del Estatuto Marco...
–Es que esta reforma va más allá de las condiciones laborales de la profesión, que también. Lo que se está poniendo realmente encima de la mesa es el futuro de nuestro sistema sanitario público. El mundo está girando hacia una situación en la que el estado del bienestar tal como lo concebimos los europeos está en riesgo. Y, en este momento en el que los vientos no soplan a favor de los servicios públicos, tenemos que darle a los médicos un entorno laboral y de desarrollo profesional en el que se encuentren a gusto. Si por un lado hay presión para sustituir a lo público, y por otro hay presión para que los médicos no se encuentran bien y quieran irse, el sistema público de salud se pone en riesgo.
–Pero ¿qué es lo que le molesta a la profesión de esta reforma normativa?
–Un paciente, cuando está enfermo, lo que quiere es que le vea un médico, que además es el último responsable del proceso asistencial. Todos los estamentos son importantes, pero a nadie se le escapa que, desde el punto de vista profesional, el médico es actor protagonista. Y el Estatuto Marco debería decir algo al respecto y reconocer el papel que le corresponde jugar al médico.
–¿Y qué papel es ese?
–La asistencia sanitaria es un trabajo multidisciplinar, en el que debemos colaborar las distintas profesiones y estamentos. Todos somos importantes, pero no podemos ser todos iguales. Siempre tiene que haber un liderazgo. Y ese liderazgo le corresponde al médico. No es cooporativismo. Es que, si somos los últimos responsables del proceso asistencial y asumimos que se nos exija una formación de diez u once años para poder ejercer sin tutelas, no se puede estar permanentemente poniendo en solfa el papel del médico. Las competencias del médico deben complementarse, pero no pueden suplantarse.
–De sus palabras se desprende que la profesión ve amenazada su posición dentro del sistema sanitario.
–Es legítimo, bueno y razonable que todas las profesiones quieran desarrollarse y adquirir competencias. Se trata de reconocer la responsabilidad que tienen los médicos en el proceso asistencial y que eso no esté en discusión.
–¿No tiene miedo de que se le remonten las enfermeras, una de las profesiones sanitarias que más terreno ha ido ganando?
–Enfermería es una profesión hermana y el trabajo que desempeñan es fundamental. Y de hecho, en la cercanía del día a día, en el acto clínico, no suele haber problemas. Pero eso no tiene que ver con que el médico sea el actor protagonista y tenga el liderazgo clínico en el proceso asistencial.
–La reforma laboral que tiene en marcha el Ministerio de Sanidad también ha reavivado el debate sobre el régimen de exclusividad. ¿Qué opina?
–Siempre hemos peleado por que se elimine el régimen de exclusividad totalmente. Si queremos construir un entorno en el que los médicos quieran quedarse en la sanidad pública, hay que darles unas buenas condiciones para que no quieran irse. Después de habernos exigido el esfuerzo que hay que hacer para llegar a ser médico y la responsabilidad sobre la salud de los demás, pensar que un médico ejerza su profesión con un sueldo base y cuatro complementos no es realista. Basta con mirar a nuestro entorno.
–¿Es posible compatibilizar sanidad pública y privada sin que se resienta la calidad asistencial?
–Completamente.
–En Asturias, los cargos directivos y los mandos intermedios del Sespa lo tienen prohibido. ¿Si estuviera permitido, usted lo haría?
–No. No sé si cuando empecé lo hubiese enfocado de otra manera. Pero en mis circunstancias actuales, no. Y creo que la mayoría de los mandos intermedios no compatibilizarían la sanidad pública y privada si le proporcionan unas buenas condiciones de trabajo. Y no es sólo un tema de ganar dinero, que nadie me malinterprete. Es también una cuestión organizativa, de desarrollo profesional...
–La Consejería de Salud se ha comprometido a revisar el concepto de exclusividad. ¿Es un paso adelante, no?
–Y estoy convencido de que cumplirá su compromiso. Pero no sé si será satisfactorio.
–El grupo Quirón tiene previsto abrir un hospital privado en Gijón. ¿Cómo ve la polémica que se ha generado?
–No parece que eso tenga por qué ser un drama. Otra cosa es en qué condiciones viene y cómo va a influir en nuestro sistema sanitario público. Pero si el grupo Quirón entiende que aquí hay un espacio para desarrollar una actividad de carácter privado, no creo que podemos ponerle puertas al mar.
–Pronto se aprobará el nuevo mapa sanitario. ¿El Colegio de Médicos le da el visto bueno?
–Básicamente lo que me parece es otra oportunidad perdida. He repetido en infinidad de ocasiones que debería haber un gran consenso entre las dos grandes fuerzas políticas a la hora de abordar cambios de este calado. O mucho cambia o esto va a ser un decreto de Gobierno sin más.
–¿Es posible reordenar la sanidad asturiana con el actual déficit de médicos?
–Yo creo que hay que dejar de estar todo el día diciendo que faltan médicos y concretar: dónde faltan, qué médicos faltan ahora, qué necesidades va a tener Asturias dentro de diez años, si hay vacantes en zonas donde ahora hay menos gente...Desde aquí ofrezco nuestra colaboración a la Administración para poder llegar a una planificación racional, porque tenemos colegiados a todos los médicos que ejercen en Asturias y podríamos hacer una pirámide poblacional. Y a partir de ahí, se podria hacer una previsión de necesidades.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
El mejor restaurante de comida sin gluten de España está en Valladolid
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.