La Aspirina 'verde': Bayer elimina las emisiones en su fábrica de Lada
La farmacéutica cambiará su caldera de gas por otra fotovoltaica más eficiente y las carretillas con las que transportan el material serán eléctricas
A. FUENTE
POZO SOTÓN (EL ENTREGO).
Viernes, 21 de abril 2023, 01:59
La asamblea general del Club de Calidad -que suma más de doscientos componentes entre empresas y entidades públicas- abordó el reto de la descarbonización y el cambio climático. Y, por eso, explicaba el presidente del colectivo, Jesús Daniel Salas, se eligió el escenario del pozo Sotón, en El Entrego. Un lugar que también sirvió para entregar el premio CEX Carlos Canales 2023 a Bayer Hispania por la iniciativa 'Green Aspirin: descarbonización en la fabricación de principios activos farmacéuticos'. En detalle, explicaba la responsable de esta iniciativa, Virginia Chomón, se trata de la supresión de la huella de carbono en el proceso productivo del principio activo de la Aspirina -el ácido acetilsalicílico- en la factoría de Lada, en Langreo.
La responsable señalaba ante el público, tras recibir el galardón, que el objetivo es la supresión de emisiones de dióxido de carbono en todas sus dimensiones. «Nuestro foco más significativo es la caldera de gas natural (en Lada); el proyecto que tenemos es sustituirla por una eléctrica que use exclusivamente energía renovable fotovoltaica. En este proceso de generación de vapor se incluye un sistema de almacenamiento térmico que aumenta la eficiencia de este proceso», afirmaba Chamón. De este modo, se logrará la descarbonización «casi total» de las emisiones directas. La responsable señaló que todavía se está diseñando el plan y que todavía no hay plazo de ejecución ni presupuesto.
Pero las medidas verdes miran también a los vehículos que usan para mover el material dentro de las instalaciones fabriles langreanas. Por eso, se van a cambiar las carretillas diésel por otras eléctricas. Son cuatro en total y se ha adquirido ya una de ellas.
«Instalaremos este mes ocho puntos de carga para coches eléctricos en la planta de Langreo», adelanta Virginia ChomónLa empresa recibe el premio Carlos Canales del Club de Calidad por los procesos de descarbonización
Pero hay más emisiones que no son tan directas, como las que se generan por el consumo eléctrico. «Desde 2020 estamos fabricando nuestros principios activos únicamente con energía que procede de una planta solar ubicada en Extremadura. Con este cambio reducimos a cero nuestras emisiones de dióxido de carbono de alcance dos».
En cuanto a un alcance más, el tres, el provocado por el movimiento, por ejemplo, de los trabajadores de sus casas al puesto de trabajo o de los viajes de negocios de los directivos. En este aspecto, la multinacional farmacéutica también actúa. «Este mes vamos a instalar ocho puntos de carga para coches eléctricos en la planta de Langreo». También se trabaja con los proveedores de materias primas para que reduzcan su huella de carbono «y tenemos proyectos para reemplazar las materias primas convencionales, que proceden de la industria petro-química, por otras de fuentes vegetales, como la biomasa». Para reducir los viajes de negocios, «solo se hacen los de carácter crítico, muchos se han sustituido por videoconferencias».
Oportunidad
Este galardón es una iniciativa de la junta directiva del Club Asturiano de Calidad como homenaje y reconocimiento a Carlos Canales Pérez, quien formó parte de esta junta desde la fundación de la entidad en 1995 y hasta 2008, y contribuyó de manera decisiva tanto al desarrollo de la organización como a la difusión e implantación de la calidad en la gestión en el Principado «durante su dilatada y fructífera vida laboral».
¿Hay oportunidad en la descarbonización? «Es como tenemos que afrontar esta situación. Hay un impacto sobre la industria más tradicional, pero hay que afrontarlo como eso para buscar nuevos modelos de negocio», explicaba Jesús Daniel Salas. «Hay que aprovechar ahora muchos de esos fondos de Transición Justa», añadía. Pero ese dinero se acabará algún día. «La clave es que tienen que ayudar a empujar, las empresas no deben existir solo por y para esos fondos. Las inversiones complicadas son las iniciales». La importancia de contar con una empresa principal tractora -como lo fue en su día Hunosa en las comarcas mineras- «es importante, pero no es la clave del futuro del territorio. Las empresas pequeñas tienen que aspirar a hacerse grandes», añadía Salas.