Siete detenidos en Tuilla por tenencia de la planta alucinógena ayahuasca
Una ex concejala de Somos Llangréu se encuentra entre los arrestados tras un «impresionante» despliegue policial
M. VARELA
LANGREO.
Domingo, 2 de octubre 2022, 01:39
Un «impresionante» despliegue policial en la tarde-noche del viernes alteró la localidad langreana de Tuilla. Tras casi ocho horas de registro en una vivienda de la zona de La Braña se llevaron detenidas a siete personas presuntamente relacionadas con la tenencia ilícita de una planta alucinógena procedente de Brasil, la ayahuasca.
Entre los detenidos figura la propietaria de la casa, R. H. C., nacida en La Felguera de 43 años profesora de un instituto, escritora y conferenciante. En los comicios de 2015 fue en las listas de Somos Llangréu, llegando a ser concejal del equipo de gobierno (IU y Somos) en 2016 tras la dimisión de otra edil. No repitió en el cargo.
Las alarmas entre los vecinos saltaron a mediados de semana cuando según quienes viven en la zona «comenzamos a comentar la presencia de hombres no habituales por el pueblo. Ahora creemos que eran policías de paisano». Previsiblemente personal de la Unidad Central de Estupefacientes de Madrid.
«Al menos unos seis furgones de la Policía Nacional subían para la Braña y no terminaban de bajar» el viernes a las ocho de la tarde.
Los vecinos de la zona se percataron de que había mucho revuelo en una casa ubicada a escasos metros de este pequeño pueblo «por donde antes había una carbonería y donde actualmente vivía una mujer con su hijo menor de edad, a la que visitaban con frecuencia más personas». Hasta este viernes nada era sospechoso. Pero la presencia de «tantos policías en dicha casa y alrededores que estuvieron hasta al menos las cuatro de la mañana nos asustó», explicaban ayer aún sorprendidos de lo sucedido en Tuilla.
Qué es la ayahuasca
La ayahuasca se obtiene mezclando dos plantas. Una, la propia ayahuasca (Banisteriopsis caapi), que es una liana de las selvas de Sudamérica. Otra, la chacruna (Psychotria viridis). Ninguna de ellas es alucinógena si se consumen por separado. El alucinógeno está en las hojas de la chacruna, que contienen DMT, o dimetiltriptamina. Pero las hojas solas no hacen efecto, ya que nuestras enzimas intestinales desactivan la DMT. Ahí entran en juego los tallos de la ayahuasca, que interrumpen el efecto de estas enzimas y permiten que la DMT sea absorbida.
No existe una única manera de prepararla. Algunos añaden alucinógenos como el peyote u otros aditivos no psicoactivos como ají o ceiba. Un recipiente de 100 litros se deja hervir hasta reducirlo a unos 10 litros. La ayahuasca se suele beber, aunque se puede fumar e inyectar. Bebida, la DMT entra en la sangre y llega al cerebro. Las alucinaciones comienzan unos 40 minutos después. Alcanzan su máximo efecto en una hora. Las diarreas y vómitos son habituales. Puede provocar taquicardia. Entre los efectos psicoactivos es frecuente la evocación de recuerdos y una fuerte introspección e hipersensibilidad sensorial. Las alucinaciones no son visuales, sino sonoras. También puede derivar en ansiedad y paranoia.