62 geriátricos asturianos registran casos positivos y 57 usuarios mueren en siete días

La segunda ola continúa actuando con crudeza en las residencias de mayores de Asturias. 62 geriátricos detectaron contagios y 57 muertes de usuarios que habían dado positivo, del 17 al 24 de noviembre. La Fundación Residencia Canuto Hevia de Pola de Lena, la más afectada, detectó 98 casos en ese periodo. Ayer este centro alcanzó los 136 afectados -110 usuarios y 26 trabajadores- tras realizar un tercer test. El geriátrico lanzó un mensaje de apoyo a la familia del residente Ramón González Viesca, de 92 años, por su muerte. González Viesca falleció el martes en el Hospital Álvarez-Buylla tal y como informó este diario. Él fue una de las personas derivadas a este hospital tras detectarse el brote el pasado día 18, y fue la primera víctima mortal de la covid en la residencia. González Viesca era el padre del presidente del Montepío de la Minería, Juan José González Pulgar. «A pesar de estos duros momentos que estamos viviendo, nos consuela saber que la mayor parte de los residentes y trabajadores afectados continúan con sintomatología leve», señalan desde el geriátrico. Por otro lado, siete usuarios de la residencia pública de Laviana fueron trasladados al Credine. En el centro continúan realizando pruebas.

Precisamente ayer el presidente del Principado, Adrián Barbón, anunció el compromiso del Ejecutivo regional de «diseñar» un nuevo modelo de asistencia a mayores «adaptado a las nuevas realidades». Se comprometió a ponerlo a prueba en 2021 en dos residencias asturianas: una de carácter público y otra privada. El jefe del Ejecutivo realizó este anuncio en la Junta y en respuesta a una pregunta planteada por el diputado de Podemos Rafael Palacios en relación a los cambios que deben realizarse en este tipo de equipamientos, tras la experiencia de la pandemia. Barbón se sumó a la críticas formuladas por Palacios sobre el mercantilismo que, en ocasiones, rodea a este tipo de centros. No obstante, defendió el modelo de atención sociosanitario de Asturias en el que, subrayó, se ha incrementado en los últimos años tanto la inversión como el número de plazas y de trabajadores.

En todo caso, asumió que la «pandemia nos ha dado enseñanzas» y apostó por que el modelo actual de residencia «evolucione» para conseguir una mejor calidad de vida de los mayores que garantice, entre otras cuestiones, «el acompañamiento en soledad no deseada», y explore fórmulas cooperativas para «envejecer juntos compartiendo vivienda».