Ordenan el ingreso en prisión del individuo que atacó a dos guardias civiles en Cangas de Onís
El juez estima el recurso de reforma interpuesto por la Fiscalía y la acusación particular y revoca la libertad dictada inicialmente
El hombre que en agosto agredió brutalmente a dos guardia civiles en Cangas de Onís deberá ingresar en prisión. Así lo ha dictaminado el juez tras el recurso de reforma interpuesto por el Ministerio Fiscal y por el abogado de los agentes afectados, quienes solicitaban el internamiento debido a la gravedad de los hechos y al riesgo de fuga.
Solicitaban «la medida cautelar dada la gravedad de los hechos, la especial virulencia de estos, lo elevado de las penas en caso de condena, el peligro de que el investigado pueda cometer hechos semejantes y al considerar que existe un posible riesgo de fuga».
El violento episodio tuvo lugar el domingo 20 de agosto junto a una sucursal bancaria de la avenida de Covadonga en la villa canguesa. El joven, de 28 años y que estaba de visita en Asturias para asistir al festival Aquasella, en Arriondas, se encontraba «fuera de sí y aparentemente bajo los efectos de las drogas».
Fueron los testigos los que alertaron primeramente a la Policía Local dado el carácter violento y la gran agresividad que mostraba, dando voces e increpando a las personas con las que se cruzaba. Los agentes de la Policía Local, debido al cariz de los acontecimientos, pidieron refuerzos a la Guardia Civil, así como la presencia de los servicios sanitarios. Una vez personados en el lugar y después de intentar calmarlo, el individuo agredió a uno de los agentes de la Benemérita, propinándole una fuerte patada en el tórax que le hizo caer al suelo. Su compañero intentó reducir sin éxito al joven, que le golpeó en el brazo y lanzó varias patadas que fueron al aire.
Al intentar esquivar la agresión retirándose un segundo hacia atrás, el joven aprovechó y le propinó una segunda patada al agente, que se encontraba en el suelo, muy cerca de la cabeza. De inmediato un tercer compañero y dos sanitarios le retiraron de la zona. Fue atendido en la ambulancia, que en principio se había trasladado para atender al agresor.
Mientras, sus compañeros y los agentes de la Policía Local de Cangas de Onís continuaron con las labores para reducir al individuo, en las que tuvieron que emplearse a fondo por espacio de aproximadamente una hora.
La brutal agresión fue grabada por los testigos, una prueba que se aporta a la instrucción, que continúa ahora con el hombre en prisión.