Piloña contará con fibra óptica en el 95% de su superficie para el año 2022

Piloña pretende mejorar sus redes de comunicación digitales, especialmente allí donde la situación de las líneas no permite alcanzar unos niveles mínimos de conectividad. Este fue el principal objetivo del encuentro que ayer mantuvieron en el Ayuntamiento el alcalde, Iván Allende (PSOE), representantes de varias juntas vecinales y el director general de Innovación, Investigación y Transformación Digital, Iván Aitor Lucas. La cita constituyó un punto de reivindicación perfecto para poner sobre la mesa las carencias de algunas zonas del municipio donde la fibra, alta velocidad, e incluso la cobertura de teléfonos móviles, resulta sumamente limitada para abordar cualquier tipo de actividad en línea, por muy sencilla que ésta pueda ser.

Desde el equipo de gobierno indicaron que el entorno de Artedosa, La Marea, El Moru, Sellón y Espinaréu aún cuentan con una cobertura «muy básica», según apuntó el primer edil. Y recordó que la parroquia de Villamayor, y especialmente su núcleo urbano, pese a ser una de las mayores poblaciones del concejo, «cuenta con una cobertura de teléfono móvil muy limitada, causando muchos problemas a los usuarios».

Actualmente se encuentra en marcha un importante despliegue de fibra óptica que alcanza a la capital del concejo, concretamente a algunos edificios que aún no contaban con esta tecnología y también a núcleos rurales como Melarde, Valles, Cardes, Valle, Areñes, Miyares, Pintueles, Mestres, Santianes y San Román. Está previsto que para el año 2022 el 95% del territorio piloñés deberá contar con esta alta velocidad. Sin embargo, la espera puede resultar difícil para los usuarios de otros puntos del concejo.

El director de Innovación se mostró satisfecho de participar en este tipo de encuentros «porque podemos escuchar a los vecinos y al Ayuntamiento, conociendo la demanda ahora que estamos preparando el Programa de Extensión de Banda Ancha (PEBA) 2020».

Lucas recordó que los vecinos «son nuestros ojos para conocer la situación real de las conexiones de internet, aunque la situación también depende de las operadoras y del ministerio», y aclaró que «actualmente lo que más nos urge es tramitar la información pública de las zonas blancas, es decir aquellas que cuentan con menos de treinta megas. Es necesario extender la fibra a estos lugares o bien una conexión 4G para mejorar la situación», apostilló.