Las rebajas en el oriente asturiano arrancan con optimismo tras crecer las ventas de Navidad un 30%

Las fiestas navideñas tocan a su fin y los comercios del Oriente se preparan para dar salida a los productos de la temporada anterior. Este fin de semana arrancaron las rebajas en Llanes, Ribadesella y Cangas, las primeras del año, y lo hicieron con bastante buena acogida. Entre los vendedores predomina el optimismo tras una campaña navideña que superó con creces todas las expectativas. «Pensábamos que por la inflación se retraería el consumo, pero no ha sido así. Los vecinos se han volcado con el comercio local», apuntaba ayer Jorge Martínez, presidente de la Asociación de Comerciantes de Llanes (Llanescor).

Si bien es cierto que el primer fin de semana hubo poco movimiento en los comercios llaniscos - «con la lluvia mucha gente prefiere los centros comerciales»-, los cielos despejados de ayer animaron a la gente a visitar las principales tiendas de la villa. Desde Llanescor son algo precavidos a la hora de hacer previsiones, no obstante, esperan que los vecinos vuelvan a demostrar su compromiso con el comercio de proximidad y se recuperen los niveles de venta previos a la pandemia.

En un año marcado por la inflación y la crisis energética, el consumo navideño en Ribadesella creció un 30% con respecto al mismo mes del año pasado. Todo un hito que desde la Asociación de Industriales y Comerciantes de Ribadesella (Aicor) interpretan como un buen augurio para la campaña de rebajas que se iniciaba ayer. Eso sí, los descuentos de las tiendas se mantienen un tanto tibios. «Se pone entre un 20% y un 30% de rebaja, a lo sumo un 40%, de otra forma estaríamos perdiendo dinero», indicaba el presidente de Aicor, Manuel García. En Cangas de Onís ni la lluvia ni el frío disuadieron a los clientes interesados en llevar a cabo las primeras compras del año. Hubo de todo. Algunos acudieron a devolver regalos de Reyes, otros, los más, aprovecharon la ocasión para comprar productos a precio de saldo.

En la zapatería Calzados del Río vendieron tanto este fin de semana pasado como en víspera de Reyes. «Ha sido una locura», cuenta Melani García del Río, responsable de este establecimiento en el que ya lucen carteles con descuentos de hasta el 50%. Lo que no tienen muy claro aún es es si este aluvión de clientes se corresponde con el furor de los primeros días o si, por el contrario, la alta demanda se mantendrá en las próximas semanas.

Los vendedores del Oriente son conscientes de la competencia que supone para ellos la venta por internet, sobre todo, a largo plazo. La tendencia entre la población joven es clara: cada vez más personas prefieren evitar colas y recibir su pedido en casa. La venta digital favorece a aquellos establecimientos que funcionan como punto de recogida. «Es exagerado. Aquí en las dos o tres tiendas que lo tienen no paras de ver gente entrando y saliendo todo el tiempo», confirma Manuel García.

La amenaza para el pequeño comercio radica en que cada vez menos gente joven consume en las tiendas de proximidad. «El comercio local sobrevive gracias a las personas mayores y cada año son menos», afirma el lider de los comerciantes llaniscos que, en los últimos días, no ha cesado de ver paquetes de Amazon circulando por la villa. Aunque la llegada del gigante del comercio electrónico a localidades como Llanes beneficia al usuario también genera incertidumbre al pequeño comerciante que empieza a replantearse cuáles son sus posibilidades futuras.

• Temas
• Principado de Asturias
• Cangas de Onís
• Llanes
• Rebajas