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GIjón. Los gijoneses aprovecharon el calor para disfrutar de la playa.

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GIjón. Los gijoneses aprovecharon el calor para disfrutar de la playa. JUAN CARLOS TUERO

«No sabemos ni qué ropa ponernos, el tiempo nos tiene mareados»

Vecinos y turistas tratan de adaptarse a un verano que no para de dar sorpresas | Las temperaturas máximas registradas fueron de 25,7 grados en Pola de Somiedo y Felechosa (Aller)

DANI BUSTO

GIJÓN.

Domingo, 7 de julio 2019, 02:11

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Con la toalla y la crema solar guardadas en la mochila, miran al cielo los asturianos que esta semana quieren disfrutar de una jornada en la playa. Y tienen difícil acertar, porque el verano en la región ha llegado rebelde y se antoja complicado saber lo que sucederá cada día, ni siquiera con las previsiones de la Aemet en la mano.

En cuanto el sol asoma por algún resquicio de entre las nubes, aquellos que pueden tratan de aprovechar sus cotizados rayos. Así sucedió ayer, por ejemplo, en Gijón, donde la playa de San Lorenzo estuvo muy concurrida desde el mediodía. El calor se mantiene -la humedad también- y muchos optaron por mojar los pies en la orilla, mientras que otros tantos se lanzaron al agua sin dudarlo. Pero siempre con un ojo puesto en las nubes, que pudieron llegar a amenazar con alguna repentina «tormentona».

«Así no hay manera de coger colorín», lamentaba Beatriz Menéndez, tras acabar su jornada laboral. «Mientras estaba trabajando veía que hacía sol, pero es salir a la calle y ya se nubla», añadía esta joven con resignación. Llegó tarde para intentar broncearse.

También Meli Suárez se queja de tanta variación. «Este tiempo nos tiene mareados» con tantos cambios repentinos «y ya no sabemos ni qué ropa ponernos». Además, añade, «si sales a la calle con paraguas porque está previsto que llueva, al final es muy probable que cargues con él toda la tarde sin abrirlo».

El aire acondicionado puede ser un alivio en ocasiones, pero en contraste con el calor de la calle ha provocado ya más de un estornudo. «Vamos a coger más catarros que en invierno», decía entre risas Alfredo Álvarez, con una toalla al hombro, mientras iba hacia la playa de El Arbeyal.

En Oviedo las altas temperaturas se combatieron con sesión de 'terraceo'. Los culinos de sidra y las cañas de cerveza fueron un buen refuerzo para combatir los 27 grados que llegaron a marcar los termómetros en el centro de la ciudad. Pero las máximas oficiales registradas por la Aemet fueron de 25,7 grados en Pola de Somiedo y Felechosa (Aller).

Trío de banderas azules

En otros puntos de la región, como Cudillero, también hubo bochorno, aunque este calor sofocante no impidió que se celebraran algunos actos destacados, como el izado de las tres banderas azules con las que contarán los arenales del concejo.

Las playas de San Pedro de la Ribera y la Concha de Artedo, y el sendero de esta última -la senda peatonal de la Costa de Artedo- repitieron un año más con este galardón. El alcalde de Cudillero, Carlos Valle Ondina, destacó que estas banderas son «un garante de que el agua de estas playas es de buena calidad».

El alcalde incidió en que «esta calidad también se da en el resto de playas del concejo, aunque no puedan recibir este distintivo debido a las condiciones de accesibilidad». Carlos Valle estuvo acompañado en el acto de izado por la directora de la oficina de turismo, Trini Fernández, y también acudieron los equipos de salvamento de ambas playas. Mañana se izarán las banderas azules en las playas de Otur y Cadavedo, en Valdés.

Hoy la meteorología también puede dar sorpresas. La Aemet prevé intervalos de nubes bajas con brumas y bancos de niebla matinales, con probables chubascos dispersos en el interior, sobre todo en la cordillera, donde podría escaparse alguna tormenta ocasional y que de manera dispersa podrían llegar también a la costa.

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