Sepides dará prioridad a la industria para ocupar el suelo de las baterías de cok

Ni Sepides ni el Ayuntamiento ni la Cámara de Comercio de Avilés quieren repetir los errores del pasado en el Parque Empresarial Principado de Asturias (PEPA). Lo que se llamará PEPA2 no será, por tanto, una especie de cajón de sastre en el que una empresa de calderería o una eólica desarrollan su actividad al lado de una tienda de zapatos o una librería.

El nuevo polígono que se levantará en los terrenos liberados de las baterías de cok diferenciará los usos. Es decir, tendrán prioridad las empresas del sector industrial, por delante de otros sectores que se considera que también tendrán su sitio, pero en las actuaciones urbanísticas programadas en el entorno de las baterías. Por ejemplo, en la Isla de la Innovación, que ocupará en su primera fase 30.000 de los 525.000 metros cuadrados previstos y se destinará al sector tecnológico.

La sociedad avilesina conocerá hoy miércoles al detalle los planes de Sepides para el desarrollo económico del suelo liberado por el cierre de las baterías de cok. Tan solo quince días después de recibir la instalación por parte de ArcelorMittal, que cesó su actividad en octubre pasado, la sociedad estatal explicará el plan director, primero al gobierno local y a los grupos de la oposición, y después a la sociedad avilesina en un acto en el salón de recepciones municipal.

Tal y como avanzó LA VOZ DE AVILÉS el pasado mes de julio de 2019, el plan director de Sepides contempla un ámbito de actuación que alcanzará los 350.000 metros cuadrados. Las superficies resultantes tras el proceso de reurbanización del terreno delimitan 230.000 metros cuadrados que se destinarán a parcelas para nuevas actividades empresariales, 80.000 metros cuadrados de viales y 40.000 de zona verdes y equipamientos. La prioridad para ocupar ese suelo será captar empresas del sector industrial, en una estrategia común de Sepides, Gobierno del Principado, Ayuntamiento de Avilés y la Cámara de Comercio. Las tecnológicas tendrán su sitio en la Isla de la Innovación, cuya primera fase se desarrollará casi de forma paralela a la urbanización y comercialización del suelo liberado por las baterías de cok.

Cabe destacar que el PEPA2 ya tiene a su primer inquilino, puesto que Química del Nalón, que se quedará con la depuradora de aguas amoniacales que ya venía utilizando previo pago a ArcelorMittal. Los nueve millones de euros que invertirá en Avilés implicarán la creación de una nueva empresa, Deganta Aguas, además de trasladar a las instalaciones avilesinas su centro de I+D y una compañía biotecnológica.

Una vez completado el primer paso de apagado de las baterías de cok y definición de los planes de cierre y protección, Sepides abordará a partir de ahora la segunda fase, el desmantelamiento y demolición de las instalaciones de las instalaciones.

En cuando a la descontaminación de los suelos que dejará libres la planta de ArcelorMittal, Sepides aseguraba en el documento base del plan director desvelado por LA VOZ el pasado verano la realización de una investigación y caracterización de suelos «que determinará un plan de remediación y descontaminación del ámbito».

Una vez abordada la descontaminación, el documento define los trabajos de urbanización de los 350.000 metros cuadrados del ámbito de actuación que define el plan director. Sepides advierte en este apartado que para transformar urbanísticamente el ámbito «será necesario tramitar una modificación del Plan General de Ordenación Urbana de Avilés con que defina la ordenación, la zonificación de usos de las parcelas pormenorizada en la que se realizará una evaluación ambiental estratégica simplificada».

Posteriormente será necesario «redactar y tramitar un proyecto de urbanización que defina las obras de urbanización propiamente las conexiones exteriores necesarias para dotar de servicios a las parcelas resultantes».

De forma paralela a ese proceso, ya está en marcha la estrategia de implantación de empresas en lo que ya se denomina desde Sepides como el PEPA2. Aquí será básica la colaboración de los agentes implicados, tanto el gobierno central a través de Sepides, como el Principado con el Idepa, el Ayuntamiento de Avilés y la Cámara de Comercio.

El acuerdo firmado el pasado verano entre Sepides y la Cámara de Comercio impulsa un servicio de captación de empresas, tanto nacionales como internacionales. Es una de las patas de un plan estratégico que, según la sociedad estatal, está abierto a la negociación para cerrar algunos aspectos sobre su desarrollo. De hecho el presidente de Sepides, Miguel Cervera, insistió en su anterior visita en Avilés en que tanto el Ayuntamiento como el Principado tienen que colaborar en la puesta en valor de este suelo industrial. Concretamente dijo que es un proyecto de ciudad «aglutinador».

Ese plan estratégico también incluirá los elementos arquitectónicos de la actividad de ArcelorMittal que se podrían conservar, con uno de los gasómetros y el edificio de telefónica como mejor colocados para tal fin, aunque todo dependerá de su estado y de las necesidades de urbanización del suelo. Se espera que Sepides anuncie hoy sus planes al respecto, si bien la idea es que en caso de que se 'indulte' algún edificio será para darle una utilidad económica.