«He elegido muy mal a los hombres»

Carmen Maura (Madrid, 69 años espléndidos que serán 70 el mes próximo) nos recibe en camisón tras rodar varios planos de El futuro ya no es lo que era en una suite del ovetense Hotel de la Reconquista que, dicen, es la que ocupan los Reyes de España cuando están en la ciudad. Pero a eso ella le da igual, ocupada como está en abrir todos los botes de serums, contornos de ojos y perfumes que le acaban de presentar firmas de lujo. «Hala, ¿qué será esto de este frasco tan bonito?», pregunta como una niña que abre los regalos de Navidad esta actriz autodidacta y generosa que, cuando tiene dudas sobre algo, hace listas de sus ventajas e inconvenientes, que empezó haciendo sustituciones y fotonovelas y que habla con tacos y un deje castizo que suena a gazpachos alucinógenos, terroristas chiítas, monjas que tocan bongos o mangueras que te empapan. Y, sin embargo, la Maura es la perfecta antidiva: «¿Y me dejarán quedarme con todo esto?».

¿Cómo va el rodaje?

La verdad es que muy bien. Hombre, la pena es que no estemos más tiempo de Oviedo. Por lo que estoy inquieta es por mi perra.

Algo muy típico de una estrella.

Tengo unas ganas locas de apachurrarla. Es una yorkshire que se llama Rita. Tuve otra 18 años, Maggie, que paseó conmigo por el mundo entero. Se murió, pero se lo pasó pipa.

Una prueba de que usted es ya un mito es que elige con quién rueda y con quién no.

Siempre lo he hecho. Cuando no me apetece una cosa Lo que pasa es que nunca se sabe qué es lo que me va a apetecer porque me dejo guiar por la intuición. Nunca pienso en lo que es beneficioso para mi carrera. En realidad, nunca he pensado en mi carrera.

Una carrera que despegó con aquel programa de Tola...

Lo pasé mal. Fueron un par de meses horribles. La fama fue un shock porque me llegó de la noche a la mañana. De repente, no me conocía nadie y 24 horas después el teléfono no paraba de sonar. Hasta la señora que trabajaba en casa, que me solía reñir por ser muy desordenada, dejó de reñirme. Es que eran doce millones de espectadores... Tenía un equipo de guionistas cojonudos y un éxito fuera de lo normal. Me agobié mucho, pero luego me hice a la idea.

Y entonces llegó Almodóvar.

Desde que lo conocí, lo vi muy listo. Lo pasé genial con él y aprendí mucho. Fue una escuela en la que comprobé que todo es posible, pero yo es que de Almodóvar no hablo Como no le gusta que hable de él No, porque se enfada Y yo tengo mucho sentido del humor y Me pongo a hablar medio en broma y para qué voy a meterme en follones.

Pero usted no tenía nada que ver con la movida.

Nada que ver... Porque yo era una niña de su casa, bien Pero esos modernos no tenían nada que ver uno con otro. La movida es una cosa un poco inventada por los periodistas para definir lo que era la España de la democracia.

¿Le gusta la etiqueta de ser una de las chicas del manchego?

Paso total. Me da igual que me digan chica Almodóvar, chica Tola, Nena, tú vales mucho, Tacita a tacita Paso olímpicamente.

Con lo que sí está a dispuesta a meterse es con el Festival de San Sebastián. ¿Qué le pasa?

Pues que estoy promocionando un coproducción franco-suiza que se llama La vanité y hemos intentado que fuera a San Sebastián en cualquier sección y no nos han cogido, lo cual me ha indignado totalmente con el Festival porque no creo que sea justo. Me parece una ordinariez.

¿Echa de menos el anonimato?

Por lo de ligar, sí. Tienes que andar con mucho cuidado porque muchos de los que se te acercan lo que quieren es presentarte a sus amigos. Era mucho mejor el anonimato, no tenían ni idea de quién era y podía inventarme la vida que quisiera. Además, la gente que se te acerca ya tiene una idea de ti y esa idea, a veces, no se corresponde con la realidad.

Ha tenido mucha más suerte en lo profesional que en lo personal.

Es verdad. Pero yo creo que es que no me he organizado bien.

Una de sus parejas se hizo con la custodia de sus dos hijos y la siguiente la arruinó...

Sí. Por eso te digo que elegí muy mal a los hombres.

Y que la felicidad completa no existe, que son momentos.

Es muy difícil, porque cuando no es una cosa es otra. Si no es un pariente enfermo es tu jefe. Hay que aprovechar los momentos. A lo mejor una noche, en un hotel maravilloso, eres feliz... Yo nunca la he vivido completa y seguida.

También afirma que, desde que es abuela, está mucho más tranquila y dice lo que le da la gana.

Mi nieta ahora está en un periodo difícil porque tiene 12 años. Pero, aunque conmigo es más seca, sé que presume de abuela en el cole. Fuimos hace poco a ver la última película de Píxar y me encantó el personaje de el asco. Yo quiero ser el asco. Me pareció monísima.

No se prodiga mucho, eso sí, en opiniones políticas.

Nunca me ha gustado que se mezclase mi potencial como persona popular con apoyar a un partido o a una persona. Me parece que es un juego diferente. Hay algunos que me caen fatal y no te los voy a decir. De hecho, no hay ningún político que me caiga muy bien.

¿Entre esos que le caen mal está el nuevo ministro de Cultura?

Le preguntaron qué pensaba del cine español y dijo que le gusta muchísimo Cine de barrio y sus actores. Yo que él me hubiera callado, porque eso quiere decir que no ha visto ninguna película reciente, así que a ver si se espabila. Yo comprendo que, como su ministerio es de Educación, Cultura y Deporte tiene mucho trabajo, pero...

¿Qué opinaría de la crisis y la corrupción don Antonio Maura?

No lo sé porque no tuve el gusto. Lo que yo pienso es que la situación actual no me gusta nada. Tú, por ejemplo, no viviste la Transición, pero fue un momento superemocionante... La llegada de Felipe González fue maravillosa... Porque era un tío con un carisma y una fuerza... Yluego, como veníamos de (hace el gesto de ahorcarse) Franco... Por eso me fastidia tanto cuando hablan mal de esa época. Porque ni lo han vivido ni saben lo que fue.

¿Ycómo ve usted nuestro cine?

A nivel de talentos estamos muy bien servidos en todos los niveles, no hay ninguna queja, y eso es lo importante porque el talento ni se compra ni se vende, aunque hay algunos que se están marchando fuera. Tenemos un problema de ayudas. Yeso que nuestras subvenciones no son diferentes que las que se dan al sector de la leche, el ganadero o la minería. Y otro de respeto por el cine: siempre parece que los actores somos los chuletas del país.

Confía mucho en Resines como presidente de la Academia...

Sí. Estoy muy esperanzada. A Resines nunca me lo hubiera imaginado como presidente de nada, pero, una vez que ha sido elegido, le apoyo absolutamente porque es insólito y surrealista. Cuando se entrevistó con Rajoy y explicó que habían hablado de «cosas de presidentes» fue genial... Tengo muchas esperanzas puestas en que consiga lo del IVA y él se debe tronchar de la risa cuando lo digo porque es el actor con el que he estado más en la cama.

Es de las pocas actrices que no ha tirado de bisturí.

No. Ni pienso. Cada uno tiene que hacer lo que le salga de las narices, pero yo no me meto en un hospital estando sana ni por salir siendo la más guapa del mundo. Yluego hay otra cosa jodida de este trabajo, que es que se utiliza el físico, pero no te puedes obsesionar, porque además yo no he basado mi carrera en ser la más guapa ni la más alta. Hago gimnasia, intento estar lo mejor posible, pero sin obsesión porque es que, si no, se convierte en tortura. Yo tengo amigas que me dicen: «Ay, que me ha salido una arruga nueva...». Y yo pienso: «Y lo que te va a salir, morena». Hija, soy lo que soy y envejezco como envejece la gente nrmal. Tengo mi derecho.

¿Ni bótox siquiera?

Nada que sea de pinchar. Voy a un sitio de belleza, aunque poco, y les digo:«Ni se te ocurra pincharme». Lo único que aguanto son cremitas, masajitos y cosas así. Porque luego empiezas y ya no puedes parar. Es una esclavitud. Si es que, además, pienso que no tienes más trabajo por hacerte la cirugía estética.

¿Qué le queda por hacer?

Yo lo que quiero es currar menos. Es que llevo unos años Cuando aquí en España no se me ve, es que estoy trabajando fuera.

¿Con quién le gustaría trabajar?

No tengo ninguna obsesión porque pienso que más vale desear cosas que luego no vas a tener. Nunca aspiré a nada. Porque un director famoso te puede hacer feliz o no

¿De verdad que lo suyo con Pedro no tiene solución y seguiremos sin disfrutar de su musa?

No creo que sea posible porque a ninguno de los dos nos apetece. Y, además, hay montones de actrices que se mueren por trabajar con él. Yo ya hecho muchas cosa con él. Eso sí:él nunca se trae a las americanas.

¿Eso es que hay cantera aquí?

No. Yo creo que les tiene miedo. ¿Ves? Ya la estoy liando otra vez. Es que cualquier cosa que diga, luego se vuelve contra mí. Se enfada, ¿sabes? Como la última vez, que se me ocurrió decir que los franceses no le iban a dar la Palma de Oro con una comedia. Pero es que conozco a los franceses y son muy especiales... Se armó una... Y tampoco es para ponerse así.

¿La actuación le ha ahorrado mucas sesiones de psicólogo?

Ahora pienso que un psicólogo me habría venido bien, pero es que ya me da pereza. Sí: actuar me ha quitado momentos tristes. Y, luego, a mí nunca se me ha dado una mala noticia en un rodaje. Mi agente me ha protegido mucho. Me han robado un montón de veces, pero hasta que no se termina el rodaje no tengo mi ración de realidad.