Los dientes de león germinan en Laboral
Bethan Hughes y Diego Flórez inauguran en el centro de Arte la exposición 'Un continuo elástico: caucho, género y poder'
Varios dientes de león gigantes nacían ayer del suelo de Laboral Centro de Arte y casi alcanzaban el techo. Allí tuvo lugar la inauguración ... de 'Un continuo elástico: caucho, género y poder', una exposición de Bethan Hughes y Diego Flórez, que «invita a la reflexión», tal y como explicaba el director general de Cultura y Patrimonio del Principado, Pablo León Gasalla. «Esta muestra incide en la explotación de los recursos naturales y se fija en la historia del diente de león, que es una planta muy vinculada al caucho, que ha tenido una repercusión fundamental en las vidas de muchísimas personas», contaba.
Con esas palabras, él celebraba que esta propuesta abriera sus puertas, precisamente, en el centro cultural gijonés porque «responde muy bien a los objetivos de Laboral de mostrar la realidad del mundo actual, desde un enfoque artístico y de reflexión crítica».
Porque, en este proyecto que ahora se hace realidad, Hughes narra la historia de los dientes de león rusos, desde la perspectiva de las mujeres cuyo trabajo estaba y está relacionado con su cultivo y explotación. La creadora inglesa, de Mánchester, hizo el viaje de esta mala hierba, «desde las montañas de Tien Shan en Kazajstán, hasta las granjas colectivas de la Unión Soviética», explicaba. Y su recorrido continuó en «los invernaderos de Auschwitz y los laboratorios de las multinacionales del neumático en Europa».
De esta manera, la instalación la vertebra un vídeo, construido a partir de fragmentos de películas mezclados con imágenes contemporáneas tomadas en Kazajistán, Holanda y Alemania. Y, a ese vídeo, le pone sonido el creador mierense Diego Flórez, quien confesaba, con la pantalla a sus espaldas, que fue «una experiencia muy bonita y muy intensa». Lo cree así porque «queríamos conseguir que los visitantes vivieran una experiencia inmersiva e introducir el aspecto más orgánico del diseño sonoro en las esculturas que van sintetizando el sonido de manera algorítmica», explicaba.
Y esos sonidos que van rompiendo el silencio tienen distintas procedencias. «Hay grabaciones de voz que hizo Bethan, pero también grabamos algunos ambientes, así como audios de campo en naturaleza, grabando distintos tipos de fauna y de flora». Por último, también se lanzaron a introducir la grabadora «en una fábrica en la que trabajan con caucho», para terminar de construir el mapa sonoro de la exposición.
Los visitantes están ante «una exposición compleja porque las historias que se reflejan son complejas», indicaba Cristina Ramos, responsable de exposiciones de Laboral. Merece, a veces, la pena enfrentar esas dificultades, con tal de descubrir las conexiones entre las personas y las plantas y cómo llegan estas a enredarse y objetivarse en las maquinaciones de la política, la guerra y el comercio.
Con todo ello, hoy a las 19 horas tendrá lugar la apertura para el público general, que podrá disfrutarla hasta mayo y ver cómo las plantas están mucho más cerca del poder de lo que, a simple vista, podría parecer. Imperialismo, capitalismo y modernidad se dan la mano y crecen, bajo el manto de dos artistas que «conectan mucho» y que viven «en la misma onda», según ellos mismos confesaban bajo varias flores gigantes.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión