La gran industria reclama contratos energéticos a precios competitivos
Las electrointensivas piden al Gobierno que active las subastas de tecnologías inframarginales para abaratar los precios
El pasado otoño se desató una fuerte tormenta que enfrentó al Gobierno con las principales compañías eléctricas que operan en España. La intención del ... Ejecutivo de reducir los beneficios de estas empresas para tratar de abaratar los desbocados precios de la luz generó una fuerte tensión que se resolvió con concesiones a las eléctricas y promesas a la gran industria. Varios meses después, los grandes consumidores de electricidad del país ven cómo las ayudas prometidas por el Gobierno no acaban de llegar, mientras tienen que seguir soportando unos costes energéticos disparados y alejados de los que tienen sus principales competidores en Francia y Alemania. Desde la Asociación de Empresas de Gran Consumo de Energía (Aege), una entidad que agrupa a firmas como ArcelorMittal y AZSA, reclaman al Ejecutivo que ponga en marcha las medidas comprometidas ante la «bestialidad» de sobrecostes que están afrontando.
Una de las principales acciones que piden desde esta asociación, en palabras de su director general, Fernando Soto, es la convocatoria de las subastas eléctricas de tecnologías inframarginales (renovables y nuclear), aquellas que tienen un coste de generación más barato. «Si las sacan ahora, se ofertaría para 2023 y los años sucesivos, pero también serviría para resolver parte del presente año», afirma Fernando Soto.
El real decreto aprobado el 14 de septiembre del pasado ejercicio por el Gobierno comprometía la obligación de las grandes productoras de energía de ofertar esta energía a precios competitivos antes de fin de año. Pero, ya entrados en 2022, las subastas no acaban de llegar, aunque la previsión del Ejecutivo es que lo hagan a lo largo de este primer semestre.
La falta de esta convocatoria está lastrando la firma de contratos bilaterales entre eléctricas y gran industria para la compra de energía a largo plazo. El Ejecutivo se comprometió a poner en marcha medidas para incentivar esta práctica, pero desde Aege se quejan de que las ofertas que llegan a sus asociados están vinculadas a los precios del mercado de futuros, aún desbocados. «Los contratos que están ofertando están vinculados a los 126 euros por MW/hora que se prevén para 2023. Nosotros decíamos que se podía ofertar energía a 55 euros y que las empresas firmarían a dos y tres años», señala Fernando Soto.
Recore
El programa Recore, que establece los precios para las centrales de renovables, cogeneración y residuos, también está entre las demandas de Aege. Con el actual periodo a punto de expirar y después de estas plantas recibieran retribuciones muy por encima de las reguladas, la asociación reclama liquidar ya las cuentas del plan para liberar unos fondos que piden que se destinen a abaratar los precios de la luz rebajando cargos y peajes. El Gobierno trabaja en esta vía, aunque se está encontrando con reticencias por parte de las eléctricas. «El año pasado tuvimos unos sobrecostes de 1.500 millones de euros y este año vamos a superar ampliamente los 2.300», señala Fernando Soto, que demanda además elevar al máximo las ayudas por costes indirectos de CO2, pasando de los 179 millones de euros previstos en los presupuestos a los más de 400 que, calculan, permite la legislación actual.
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