¿Qué es una sidrería de calidad?
Lluis Nel Estrada
Miércoles, 4 de febrero 2015, 13:31
La pasada semana la Dirección General de Turismo del Principado de Asturias presentaba una nueva marca de calidad turística para las sidrerías asturianas, para nuestros 'chigres' de calidad. Lo cierto es que únicamente se presentó estrictamente eso. Una 'marca', una enseña, un logotipo que, independientemente de que nos pueda gustar mucho o poco o resultar más o menos atractivo, por lo que sabemos aún está vacío de contenidos. Sería quizás la premura por presentar este nuevo marchamo en FITUR 2015, o tal vez la necesidad de ir moviendo ficha de cara a la próxima campaña electoral, el caso es que, sea como fuere, como propósito de intenciones la marca 'Sidrerías de Asturias. Calidad Natural' apunta maneras, siempre y cuando respondamos a criterios fundamentados a la hora de redactar el pertinente pliego de condiciones para adherirse a la misma.
No sé ustedes pero yo, por devoción y profesión tengo claro lo que es una sidrería asturiana de calidad natural. Un chigre. Un chigre de verdad. Un chigre auténtico, donde evidentemente imperen la calidad del producto, tanto de la sidra como de la oferta gastronómica que acompaña a esta. Un servicio especializado, profesional, que sepa dar el tratamiento requerido a nuestra bebida patria; rotación de palos, temperatura ideal de la sidra, correcto escanciado y cadencia del mismo; con un trato cercano y un servicio de mesa quizás un tanto desenfadado.
Una sidrería de calidad es aquella donde huele a sidra, pero a sidra limpia, porque la limpieza debe ser otro de los requisitos irrenunciables para ser un buen chigre; chigre en el que no deben existir escanciadores automáticos y en el que además, ya bien entrados en el siglo XXI deben de comenzar a hacerse un evidente guiño al resto de nuestra oferta sidrera, junto con la natural de escanciado tradicional ya existen otras sidras, sean espumosas, de hielo o de mesa, así como aguardientes derivados de la misma que como productos diferenciados y excelsos deberían de tener presencia estable en este subsector, quizás el más importante, de la hostelería asturiana.
No estaría de más que esta marca siguiera el ejemplo de alguna que otra empresa privada y se exigiera que en toda sidrería acogida a la misma se contara con la figura de un Maestro Escanciador. Una especie de sumiller de la sidra que en pequeños establecimientos, gerenciados por expertos en sidra podrían ser estos mismos. Expertos que deberían transmitir su conocimiento y experiencia a personal y clientela porque tan necesario es contar con un buen profesional escanciador como aleccionar a nuestros clientes en el correcto consumo de la sidra y en el conocimiento del legado cultural que representa este producto.
Por cierto, que digo yo que el target potencial de estas Sidrerías de Asturias con calidad natural estará situado en la propia comunidad autónoma, y por lo pronto en su turismo interior. Por lo que no sobraría que la propia marca, versara también en la lengua de la sidra, en la lengua asturiana, como seguro harían nuestros vecinos vascos o gallegos con cualquiera de sus marcas Sonaría bien algo asi como 'Chigre d`Asturies. Calidá Ñatural'Sonaría bien hasta en FITUR!!