Borrar
El bodeguero de Señorío de Ibias, Adrián Fernández. E. C.
«El vino de Cangas, por fin, se bebe en toda Asturias»

Adrián Fernández. Bodega Señorío de Ibias. Nuevo presidente del Consejo Regulador de la DOP Vino de Cangas

«El vino de Cangas, por fin, se bebe en toda Asturias»

La marca ha multiplicado producción y visibilidad: «Somos 63 viticultores, 600.000 metros cuadrados de viñedo y ocho bodegas, y este año habrá una novena en Ibias»

Sábado, 20 de julio 2024, 02:00

Adrián Fernández (Oviedo, 1998) ha hecho de Ibias su casa. Ahí sus padres compraron un terreno para plantar vides en 2002 y él encontró su futuro sumando la bodega. El responsable de Señorío de Ibias tiene estos días su mesa de trabajo llena de datos de la DOP Vino de Cangas porque es el nuevo presidente de su Consejo Regulador.

–¿Cómo lo lleva?

–Bien (Ríe). Como ya estaba en la Junta porque era vocal en la anterior legislatura, ya sé de qué va. Es un cargo que nadie quiere porque da trabajo...

–¿Presidente por convicción o por la situación?

–No tenía interés en serlo al principio, pero me empezaron a llamar los compañeros y me convencieron. Y no hubo elecciones porque tras la renuncia de José María solo se presentó una candidatura por parte de los bodegueros y otra de los viticultores; el pleno debe constituirse con una representación equitativa de ambas.

–Los dos últimos presidentes, José María Martínez y Beatriz Pérez, renunciaron. ¿Qué pasa?

–No lo sé, a mí nada. Tampoco sabemos por qué dimitió más allá de los motivos personales que arguyó por wasap...

–Llega al frente de la denominación vitivinícola asturiana que está, ¿cómo?

–No sé lo que se ve desde fuera, pero ya somos 63 viticultores, siete de los cuales se han incorporado este año; 600.000 metros cuadrados de viñedo y ocho bodegas certificadas repartidas entre Cangas del Narcea (seis) e Ibias (dos). Y la próxima vendimia seremos una más en Ibias: Viña Áurea.

–¿Qué objetivos se marca a corto, medio y largo plazo?

–El presidente no llega para hacer lo que quiere; no funciona así. Es la persona que reúne las inquietudes y las peticiones de todos. Cuando celebremos el primer pleno, expondremos qué queremos hacer en estos años y el camino a seguir para conseguirlo.

–¿Será rupturista?

–No, no creo que vaya a haber grandes cambios en la línea de trabajo. Estamos muy centrados en la comercialización porque hasta ahora había muy poco vino. De la última vendimia han salido 110.860 botellas de tinto y 124.162 de blanco. No es mucho, pero con esos números casi duplicamos la cosecha anterior y casi triplicamos la de 2021. Y ya hay algunas bodegas interesadas en exportar.

–También hay más viña...

–Ha aumentado mucho. Sin datos concretos, calculo que un 40%. Y a esto hay que sumar plantaciones que se han hecho nuevas y se darán de alta el año que viene.

–¿A qué se debe: a que llega más gente o a que los que ya están se hacen más fuertes?

–A todo un poco. Pero es muy complicado acceder al terreno porque hay muchísimo minifundio. Para poder plantar tienes que poner de acuerdo a los propietarios y hay veces que son repartos de familias o vecinos que discrepan... Y no todo vale para viñedo, tienen que ser laderas con orientación sur.

–No como presidente, sino como profesional que vive del vino. ¿Qué ve necesario?

–Seguir creciendo, porque cuantas más botellas saquemos, más nos conocen. Crecemos en cantidad y también en calidad, y eso es lo que nos va a permitir entrar en más mercados y conseguir mayor reconocimiento.

–¿Dónde se beben esas botellas?

–La mayoría en Asturias y algo en el resto del país. Lo que sale de España es casi anecdótico.

–Ha cambiado la tendencia porque hace unos años fuera del suroccidente se bebía poco.

–Sí, y no hace mucho. Hace tres o cuatro años, iba a restaurantes a presentarles vino y era muy raro que tuviesen algo de Asturias; sin embargo ahora todos los restaurantes de prestigio de la región tienen, mínimo, dos o tres referencias.

–Eso ayuda a que pierda la mala fama...

–Claro, es que ahora no tiene nada que ver con el vino que se bebía en los años 70 y 80. Hay una normativa muy estricta en cuanto al origen de la uva, su calidad y los rendimientos de producción. Son muchos requisitos que redundan en la calidad del producto.

–Se habló, aun sin mucho empuje, de modificar el nombre para deslocalizar un producto que no solo se produce en Cangas. ¿Es real?

–Es muy complicado, así que no es algo en lo que estemos. Se llama así porque hace más de 20 años, la bodega que lo movió todo, la única que había, estaba en Cangas. Después, se empezó a plantar viñedo en otros sitios y fueron incluyéndose más concejos; ahora hablamos de Allande, Tineo, Degaña, Grandas de Salime, Pesoz, Illano, Ibias y Cangas. De hecho, en mi concejo tenemos una superficie de viñedo que ronda el 40% del total...

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elcomercio «El vino de Cangas, por fin, se bebe en toda Asturias»