Isabel II planea retirarse pero sin renunciar al trono
Carlos de Inglaterra podría convertirse en 2021 en príncipe regente una vez que la soberana cumpla 95 años, según la prensa británica
s. z.
Sábado, 30 de noviembre 2019, 01:14
Algo se está cociendo en el Palacio de Buckingham, donde los mentideros reales están en plena ebullición después de la crisis abierta esta pasada semana por las escandalosas declaraciones realizadas por el príncipe Andrés para justificar su relación con el millonario y pedófilo estadounidense Jeffrey Epstein. El intento de calmar la oleada de críticas tuvo un efecto contrario al deseado. El tiro le salió por la culata y obligó a la Casa Real a tomar cartas en el asunto.
Tras lo ocurrido, todo apunta a que el príncipe Carlos, el eterno heredero a la Corona británica, podría estar ahora más cerca del trono al anunciarse que asumirá las funciones de su madre y se convertirá en príncipe regente en abril del 2021, cuando la reina Isabel II cumpla 95 años. La idea de la soberana es retirarse de la escena pública y dejar paso a su heredero, pero sin renunciar al trono. Así lo recogen diferentes medios británicos, que ya especulan con la transición que hay en marcha.
Carlos toma las riendas
Su relevante papel en esta polémica, coordinando con su madre una respuesta contundente que sirviera de cortafuegos, lo ha situado en primera línea. Andrés fue obligado a renunciar a todas sus funciones públicas y la conclusión general es que el príncipe de Gales ha tomado las riendas de los asuntos de la familia real. A todo eso se une la retirada de su padre, el duque de Edimburgo, de la vida pública hace tres años y que la reina Isabel II ha reducido gradualmente la cantidad de actos a los que asiste. Eso ha obligado al heredero a dejarse ver más a menudo como representante de la familia real.
Carlos de Inglaterra acaba de cumplir 71 años, de los cuales 67 los ha pasado como primero en la línea de sucesión al trono. Una espera muy larga, aunque desempeña cada vez más funciones oficiales.
El primogénito de Isabel II, que siguiendo el ejemplo de su madre no se plantea abdicar en su hijo Guillermo pese a que éste goza de mayor popularidad, es el príncipe que más años ha sido heredero a la corona de la historia británica y el que más años ha ostentado el título de príncipe de Gales, que recibió en 1958. De producirse finalmente esta transición al trono británico, habría que remontarse al año 1811 para recordar la última vez que se ensayó en el Reino Unido la figura del 'príncipe regente'.