«Gijón está con las tradiciones. Somos una ciudad de mar»
La alcaldesa de Gijón recibe con «sorpresa y alegría» el nombramiento de cofrade de honor de Nuestra Señora del Carmen
«Es una sorpresa y toda una alegría». La alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón, fue nombrada ayer cofrade de honor de Nuestra Señora del Carmen ... . En el acto, que se celebró en la iglesia de San José, también se impuso el escapulario y la medalla de la cofradía a los treinta y ocho nuevos integrantes de la misma. En total, ya suman 167.
Esta cofradía llevaba «bastantes años» en letargo. Fue en 2024 cuando recuperó la actividad. «Tienen el apoyo institucional. Nosotros estamos con las tradiciones. Gijón es una ciudad con mar. Todas las ciudades que lo tienen celebran el Carmen. No podíamos ser menos», explicó la alcaldesa. Para la regidora, cuya celebración coincide con su santo, este honor «es más emotivo».
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El párroco de San José, Fernando Llenín, fue el encargado de dirigir la eucaristía previa a la imposición. A esta acudieron a la decenas de gijoneses. Tras la misma, se celebró la Novena a la Virgen del Carmen y, después, se realizó el juramento por parte de los cofrades. Entre ellos se encontraba Beatriz López. «Soy muy devota de la Virgen del Carmen», confesó. Se debía a que «me gusta mucho el mar, navego y, además, mi madre se llama así». Por todo ello, este año porteará en la procesión. Jesús Ballesteros siempre quiso pertenecer a una hermandad. El año su mujer se hizo cofrade. «Este me tocaba a mí», dijo con una sonrisa. «Es un acto muy bonito que le da relevancia a Gijón como ciudad», señaló sobre la procesión. En la imposición, también tuvo lugar la jura del cargo de la nueva secretaria de la cofradía: María José Queipo.
«Recién llegados de Sevilla»
El acto tenía una especial relevancia para el Hermano Mayor de la Cofradía de Nuestra Señora del Carmen, Álvaro Fernández. No solo por «seguir creciendo» como entidad religiosa, sino también por poder presentar «algunas de las novedades» que este año habrá para la procesión de la Virgen, que se celebrará el día previo a su festividad, es decir, el 15 de julio.
Ante la atenta mirada de los cofrades, se desveló, en primer lugar, el manto que lucirá. «Es en color crema y todo bordado en color dorado. Es obra de Bordados Perales». También la corona que, en este caso, «la parte abajo se trata de una recreación de la de la Princesa de Asturias. Ha sido hecha por el orfebre Orovio de la Torre. «Es uno de los más cotizados de este país», señaló Alonso. Ambas piezas estaban «recién llegadas de Sevilla». También se mostró el vestido, en marrón y con el escudo de la cofradía en medio. La belleza de los adornos que llevará la Virgen maravilló a los allí presentes.
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