Sidra Quelo, de Tiñana, premio Elogio de Oro

Ser la mejor de las mejores sidras. Es lo que distingue el premio Elogio de Oro, que este año tan particular fue a parar a manos de los hermanos Gonzalo, Alberto y Mónica Fanjul, propietarios de Sidra Quelo. El galardón se incluye dentro de la XXVIX Fiesta de la Sidra Natural y supone el broche final a la misma tras diez días de actos adaptados a una situación sanitaria que obligó a renunciar a citas multitudinarias como el tradicional escanciado en la playa de Poniente.

«Estamos muy contentos. Nuestra apuesta busca la calidad, que se hagan las cosas bien. Y creo que este premio es un reconocimiento al trabajo bien hecho», señalaba Gonzalo Fanjul. Este llagar llevaba más de una década sin participar «porque hasta este año solo podían apuntarse los que hubieran participado en Gijón de Sidra y nosotros ahí ya lo hicimos hace quince o veinte años. Nos parece mejor poder apuntarnos a este certamen sin tener que hacerlo en el otro».

A la hora de tomar su decisión, cree que el jurado valoró que su sidra «es muy equilibrada y sabrosa, así como secante». Y añade que ese equilibrio entre un buen sabor inicial y un acabado en boca es «lo que la hace diferente a otras». Apunta como cualidad adicional que «tiene buen pegue», es decir, buena adherencia de la espuma sobre el vaso. Asegura que todas estas virtudes también son muy valoradas por los clientes que acuden al lagar. «Está gustando mucho en general. Yo creo que en el concurso tal vez pudo haber otros toneles que también eran muy ricos, pero quizás menos equilibrados».

Fanjul defiende que «a quien le gusta la sidra la toma con lo que sea», aunque considera que la de Quelo marida muy bien sobre todo «con determinados entrantes, algún pescado y también con embutidos».

Por supuesto, al lagar de los hermanos Fanjul también llegaron las consecuencias del estado de alarma. Pero se muestran optimistas de cara al futuro. «Hubo mucha incertidumbre. Fueron unos meses de parón difíciles para todos, pero la temporada de verano arrancó muy bien. De hecho, en julio y agosto ha estado incluso por encima de la de 2019», asegura, al tiempo que confía en recuperar poco a poco lo perdido.

Además de trabajar la sidra natural, Sidra Quelo también lo hace con la 'brut', con la que Gonzalo Fanjul considera que se podría trabajar la exportación. Se utiliza «para bodas, comuniones y ese tipo de eventos especiales. La natural es difícil sacarla fuera, pues necesita unos cuidados muy específicos». El lagarero ve necesario «que se hagan más catas de sidra para que la gente conozca bien el producto y lo valore más».